Bruselas, 13 ene (EFE).- EL Tribunal de Cuentas de la UE criticó
hoy la falta de criterios específicos y de dirección para determinar
las prioridades de la ayuda financiera que la Comisión Europea (CE)
destina a Turquía en su camino a la adhesión.
Bruselas destina regularmente fondos para proyectos que ayuden a
los países candidatos a ingresar en la UE a alcanzar los requisitos
y condiciones previstos en los Tratados para pasar a ser un socio
comunitario, asistencia financiera que audita el Tribunal de Cuentas
Europeo y hace públicos en informes como el difundido hoy.
El primero en esta materia llevado a cabo por el Tribunal con la
información extraída el programa "Asistencia para la Pre-Adhesión de
Turquia" (Turkey Pre-Accession Assistance TPA), puesto en marcha en
el 2000 y que funcionó hasta 2006, cuando fue reemplazado por el
Instrumento de Preadhesión (TPA).
Ambos programas siguen siendo dirigidos por el llamado sistema de
ejecución descentralizada, ya que aunque la Comisión tiene la
responsabilidad general de la gestión de la ayuda de preadhesión,
los programas son administrados por las autoridades turcas.
Ya que a finales del 2003 se pusieron en marcha nuevas
instituciones turcas bajo la autoridades del país y acreditadas por
la Comisión.
Entre ellas se encuentra el Secretariado General para la Unión
Europea (EUSG), que responsable principalmente para la
identificación y seguimiento de proyectos, y la Central de Finanzas
y Contratos (UCFC), que es el agente de contratación para todos los
proyectos financiados por la UE.
Como parte de este sistema, la Delegación de la Comisión en
Turquía realiza controles ex-ante en la adquisición y contratación,
con un presupuesto de unos 500 millones de euros al año para los
nuevos compromisos.
Aunque por lo general los principales beneficiarios suelen ser
organismos públicos que proponen proyectos, especificando los
requisitos y posteriormente les gestionan.
En esta ocasión, el documento ha hecho hincapié en que no se
fijaron objetivos específicos y que los plazos para conseguir los
requisitos "no eran realistas".
Además, se critica que la CE no cuente con suficiente información
para demostrar la efectividad de esos fondos que destina a Turquía,
"ni siquiera el valor del dinero" o "las fundamentos básicos de la
gestión" de los fondos.
Pese a todo, el Tribunal ha considerado que sí se han conseguido
algún objetivo, como es el "compromiso" por parte de los
beneficiarios turcos.
El Tribunal de Cuentas ha incluido también en el informe varias
recomendaciones correctivas, centrándose en marcar estrategias para
fijar objetivos de ayuda financiera y así como desarrollar plazos
más realistas para su ejecución y resultados basados en objetivos
claros y apropiados indicadores. EFE