Londres, 1 feb (EFE).- El consejero delegado del banco británico Barclays, Antony Jenkins, anunció hoy que renunciará a su millonaria bonificación de 2012 debido a la "muy difícil" situación vivida por esa entidad ese año, cuando se vio salpicada por el escándalo del Libor.
Aunque la suma total no ha sido aún confirmada, Jenkins podría haber renunciado a cobrar una bonificación máxima de 2,75 millones de libras (3,19 millones de euros), es decir, el 250 % de su salario anual de 1,1 millones de libras (1,27 millones de euros).
El banquero, que accedió al cargo el pasado agosto, aseguró hoy en un comunicado que considera "justo" que se le aplique una cuota de responsabilidad y que deba "rendir cuentas" por "todos esos asuntos" que empañaron la imagen de Barclays durante el pasado año.
"Soy consciente de que hay mucha especulación e interés público respecto a si me darán un bonus por mi actuación en 2012. Para evitar más debate público innecesario sobre esta cuestión, quiero dejar claro que decidí a principios de esta semana que no quiero que me den una bonificación", señaló Jenkins.
Según el jefe de Barclays, el pasado año fue "muy difícil" para la entidad y su accionariado como consecuencia de "los múltiples asuntos que rodearon al banco", por lo que consideró que "sería un error recibir una bonificación dada las circunstancias".
Barclays fue objeto en 2012 de varias investigaciones por venta indebida de productos y pago de comisiones, así como por el intento de manipulación del Libor entre 2005 y 2009, por el que fue multado en junio y tras el que dimitieron varios de sus directivos, entre ellos su entonces consejero delegado, Bob Diamond.
Tras acceder al cargo el pasado 30 de agosto, Jenkins admitió que el proceso de restablecer la reputación de su banco "llevará tiempo", al nismo tiempo que se comprometió a cambiar una cultura interna que, dijo, potenciaba la especulación y el riesgo. EFE