Jesús María Alonso
Madrid, 24 abr (EFE).- Grecia, ahogada por sus deudas, ha pedido
ayuda a la Unión Europea (UE) y al Fondo Monetario Internacional
(FMI), necesitada de más de 40.000 millones de euros este año y
presionada por los mercados por el impacto que puede tener su
hundimiento en la recuperación económica global.
Después de meses de dudas, que también han llevado a la
incertidumbre a sus socios europeos, Grecia pidió este viernes
formalmente dinero a la UE (30.000 millones de euros al 5% de
interés) y al FMI (10.000-15.000 millones a menor interés), tras
certificar la UE que el déficit fiscal heleno había subido del 12,7
al 13,6% del PIB.
Atenas debe 273.000 millones de euros o un 115% de su PIB, lo que
convierte su futuro económico en una amenaza, a tenor de lo que
observan la UE, el FMI, el Banco Mundial, el G20 y el G7, reunidos
este fin de semana en Washington aprovechando sus citas semestrales.
La UE, no obstante, ha supeditado la aprobación final del
rescate, prevista para primeros de mayo, a que Grecia diseñe un
ajuste duro de tres años, medidas de ahorro que han sacado ya en las
últimas semanas a la calle a la población para protestar.
El FMI y el BM han mostrado su preocupación por el caso y la
amenaza que supone para el crecimiento global y para la estabilidad
a los mercados financieros, pero la petición de ayuda ha aliviado la
tensión de las bolsas, que acabaron la semana optimistas.
El FMI, además, prevé mejores perspectivas que en enero pasado
para la economía global. El mundo crecerá un 4,2% en 2010 (4,3% en
2011), gracias al ímpetu de las naciones emergentes, aunque advirtió
de que será necesario un ajuste fiscal y cambiario.
De esta situación general se congratuló el G-20, que pidió
mantener los programas de estímulo a los países con finanzas
públicas "sostenibles" y constató que la recuperación mundial ha
sido más rápida de lo previsto.
Latinoamérica también será uno de los motores del crecimiento
global, pues el FMI prevé una recuperación "robusta" que le hará
crecer un 4% en 2010 y 2011, animada por los países del Cono Sur y a
pesar del lastre de Venezuela y el Caribe, que pondrán la nota
negativa.
Mientras los ministros de economía de los principales países y
los organismos multilaterales se hacen cábalas con Grecia, Europa
respira tranquila al acabar la pesadilla aérea por la nube de
cenizas del volcán islandés.
El caos aéreo vivido durante siete días en el Viejo Continente ha
causado pérdidas a las aerolíneas superiores a los 1.700 millones de
euros, según la IATA, que tendrán consecuencias en sus resultados
financieros futuros, y ha repercutido negativamente en el sector
turístico.
En empresas destacan los resultados de Goldman Sachs, que ganó
3.456 millones de dólares en el primer trimestre del año (+91%),
días después de la demanda presentada por la Comisión del Mercado de
Valores de EEUU contra el banco de inversión por supuesto fraude en
la comercialización de un producto de deuda estructurada.
En el sector tecnológico, Windows 7 empujó a Microsoft a ganar un
35% más en el mismo periodo (4.010 millones de dólares), mientras
que Apple casi duplicó sus ganancias (3.010 millones) y Yahoo! las
multiplicó por 2,6 (310,2 millones).
El grupo automovilístico italiano Fiat reestructuró sus
actividades industriales y sus negocios del automóvil con la
creación de Fiat Industrial, además de asegurar que prevé unos
beneficios netos de 5.000 millones de euros en 2014 y de nombrar
nuevo presidente a John Elkann, en lugar de Luca Cordero de
Montezemolo, que sigue al frente de Ferrari.
Wall Street ganó el 1,7%, mientras que los parqués europeos
circularon por terrenos movedizos por culpa de la crisis griega y
acumularon pérdidas semanales. Los asiáticos y los latinoamericanos
estuvieron mixtos.
El euro se depreció en Fráncfort a 1,33 dólares, y el petróleo
siguió su tendencia alcista y cerró a 85,12 el Texas neoyorquino y a
87,25 el Brent londinense. EFE