Buenos Aires, 18 ago (EFE).- La huelga de trabajadores petroleros
que paraliza la actividad de cinco compañías del sector cumplió hoy
su décimo día con millonarias pérdidas en la provincia de Santa Cruz
(sur del país), tercera productora de hidrocarburos de Argentina.
El Sindicato del Petróleo y Gas Privado de Santa Cruz, provincia
natal del ex presidente argentino Néstor Kirchner, exige un aumento
salarial del 25 por ciento retroactivo a mayo frente a la mejora del
20 por ciento ofrecido por las firmas, la mitad a pagar ahora y el
resto en enero de 2010, informaron a Efe fuentes del sector.
La protesta está acompañada por la ocupación de una planta de la
petrolera hispano-argentina Repsol YPF en la localidad santacruceña
de Las Heras, uno de los principales focos de un conflicto que está
latente desde abril pasado.
Se calcula que Santa Cruz, en el extremo sur de Argentina, ha
perdido hasta hoy unos seis millones de dólares en concepto de
derechos de explotación de crudo y gas, indicaron los portavoces.
La huelga afecta a las petroleras estadounidenses Chevron y Oxy,
la brasileña Petrobras y la chilena Sipetrol, además de reducir el
suministro al gasoducto San Martín, en manos de una compañía
controlada por Petrobras Energía.
Las empresas han intimado a los trabajadores a que levanten la
huelga declarada el 9 de agosto pasado en vista de que rige una
conciliación obligatoria dictada hace una semana por el Ministerio
de Trabajo, pero el sindicato insiste en mantener la protesta.
El conflicto cumplió diez días en momentos en que está previsto
que el gobernador santacruceño, Daniel Peralta, sea recibido el
miércoles por la mandataria argentina, Cristina Fernández, esposa y
sucesora de Kirchner, quien gobernó Santa Cruz durante once años
antes de acceder a la jefatura del Estado (2003-2007).
La web Opisantacruz.com.ar, medio de prensa opositor al gobierno
santacruceño, aseguró que Peralta "arengó" a los huelguistas en
contra de las petroleras durante una asamblea sindical llevada a
cabo la semana pasada, lo cual habría indignado a Kirchner.
Santa Cruz, de unos 200.000 habitantes y 243.943 kilómetros
cuadrados de extensión, atraviesa por una crisis económica que ha
obligado a Peralta a aplicar una política de austeridad. EFE