Por Nick Olivari
NUEVA YORK, oct 10 (Reuters) - El dólar subió el viernes a un máximo en 15 meses ante una cesta de divisas principales, luego de que el desplome bursátil y los ajustados mercados crediticios llevaran a los inversores a buscar efectivo en la moneda de reservas mundiales.
Más temprano, la búsqueda de seguridad llevó al yen a un máximo en más de seis meses ante la divisa estadounidense, y a su nivel más alto en tres años ante el euro.
Los inversores están atentos al encuentro de ministros de Finanzas y funcionarios de bancos centrales del Grupo de los Siete países más industrializados del mundo en Washington, en espera de una solución para revivir al sistema bancario global luego de que las medidas tomadas hasta ahora no lograran descongelar los mercados crediticios.
"El dólar sigue operando bastante más sólido en una base agregada, ya que la aversión al riesgo sigue siendo el principal conductor de los mercados cambiarios y de acciones mundiales", dijo Dustin Reid, estratega cambiario de RBS Global Banking & Markets en Chicago.
Al cierre en Nueva York, el índice dólar, que mide el desempeño de la divisa ante una cesta de seis monedas principales, subió 1,2 por ciento, a 82,419 <.DXY>, tras alcanzar más temprano su mayor nivel desde junio del 2007.
Con un 6,7 por ciento de ganancias en las últimas dos semanas, el índice registró sus mejores 14 días desde septiembre de 1992.
El euro cayó un 1,5 por ciento frente al dólar, y se cotizó a
1,3399 unidades
La moneda única perdió 7,8 por ciento ante el dólar en las dos últimas semanas, en sus peores 14 días desde la introducción del euro.
El recorte coordinado de las tasas de interés de parte de la Reserva Federal y otros importantes bancos centrales del mundo esta semana no logró aliviar los temores de los inversores, de que la congelación de los mercados de crédito perjudicará más a los bancos y generará una fuerte recesión económica a nivel mundial.
Previamente en la sesión, las acciones estadounidenses se desplomaron, enviando el índice referencial S&P 500 por debajo de los 900 puntos por primera vez en cinco años, luego de que los inversores liquidaran sus activos riesgosos.
Sin embargo, para final del día, los mercados bursátiles se alejaron de sus mínimos, aunque cerraron la jornada a la baja.
"Hay esperanzas de que la reunión del G7 termine con alguna acción coordinada de parte de los encargados de establecer la política monetaria. Sigue siendo un mercado extremadamente volátil y nervioso", dijo Vassili Serebriakov, estratega cambiario en Wells Fargo en Nueva York.
"Pero para nosotros, los sucesos de la última semana han mostrado que las autoridades monetarias están preparadas para hacer lo que sea necesario para estabilizar los mercados. Hay un entendimiento global de la gravedad del problema", añadió.
El dólar se vio estimulado luego de que un funcionario del G7 dijera el viernes que es poco probable que el grupo adopte la propuesta británica para garantizar préstamos interbancarios.
El euro cerró la jornada con baja de 0,4 por ciento frente al
yen, y se cotizó a 134,57 unidades
El dólar, en tanto, operó con un alza de 1 por ciento frente
a la moneda japonesa, y cerró en 100,41 yenes
No obstante, pese a las ganancias del dólar el viernes, la moneda estadounidense registró su peor semana ante el yen desde noviembre de 1999 a los precios actuales.
(Reporte adicional de Steven C Johnson)
(Reporte de Nick Olivari y Wanfeng Zhou; Editado en español por Rodolfo Saavedra)