Teherán, 5 abr (EFE).- El líder supremo iraní, ayatolá seyyed Ali
Jamenei, afirmó hoy que la puesta en práctica del proyecto
quinquenal depende a la unidad y la coordinación de los tres
poderes, el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial.
Según la agencia semi local de noticias Mehr, Jamenei hizo esta
declaración durante una reunión hoy con los representantes de los
tres poderes.
"Las condiciones actuales, en las que tenemos por delante la
puesta en práctica el proyecto quinquenal de desarrollo, comprometen
a los responsables a mantener la uniformidad para poder aplicar este
proyecto", dijo Jamenei en alusión a los desacuerdos entre el
Gobierno y el Parlamento sobre el polémico plan de recortar los
subsidios.
El líder supremo iraní añadió que la diferencia de las ideas no
es malo siempre y cuando no impidan el desarrollo del país.
"El Gobierno es el poder que ejecuta los proyectos y por ello
todos, teniendo en consideración el bien del país, deben ayudarle y
preparar el terreno para trabajar", agregó.
"Espero que con un acuerdo adecuado entre el Gobierno y el
Parlamento se pueda aplicar el proyecto de la orientación (el
recorte) de los subsidios para que la gente se beneficie de sus
resultados", añadió.
El Gobierno de Mahmud Ahmadineyad ha presentado un ambicioso plan
económico para erradicar los subsidios que fue aprobado el pasado
mes de octubre por el Parlamento tras un año de dura batalla entre
el Ejecutivo y el Legislativo.
Este proyecto, defendido a ultranza por Ahmadineyad, pretende
sustituir los subsidios al combustible, los alimentos y la gasolina,
entre otros productos, por ayudas directas y en efectivo a la
población.
El plan ha recibido sin embargo innumerables críticas, sobre todo
de diputados y economistas locales que creen que disparará la ya
alta inflación que sufre el país.
Los parlamentarios iraníes han expresado, asimismo, su reticencia
a que sea potestad total del Gobierno, que de esta forma podría
controlar más del 50 por ciento del presupuesto del país, algo que
según los diputados atentaría contra la Constitución.
La polémica reside ahora en el volumen de los ingresos que el
Gobierno desea tener en sus arcas procedentes del recorte de los
subsidios.
Mientras que el Gobierno quiere tener unos 40.000.millones de
dólares de ingresos procedente de este proyecto, el Parlamento ha
acordado solamente la mitad alegando que la cifra deseada por
Ahmadineyad requiere una destacada subida de los precios, sobre todo
en los productos energéticos como la gasolina, el gas y la
electricidad.
Ahmadineyad ha enviado en los últimos días una carta al
presidente del Parlamento, Ali Lariyani, en la que ha pedido ayudas
para paliar los problemas en cuanto a la aplicación de este
proyecto. EFE