Sao Paulo, 27 nov (EFE).- El índice Ibovespa de la bolsa de Sao
Paulo cerró la semana que termina hoy en 67.082 puntos, lo que
supone un avance del 1,14 por ciento, que incluso podría haber sido
mayor si no se hubiera presentado el terremoto financiero mundial
desatado por la crisis en Dubai.
Después de que los problemas en Dubai arrastraran al parqué
brasileño a perder el jueves un 2,25 por ciento, el día de hoy la
plaza se recuperó parcialmente de la sacudida y avanzó 1,04 por
ciento en consonancia con los mercados europeos.
Los inversores de Sao Paulo consideraron exagerada la reacción de
la víspera por los problemas financieros del Dubai World, ya que el
país no está "expuesto a ese fondo ni a ese tipo de problema", en
palabras del presidente del Banco Central, Henrique Meirelles.
La semana bursátil comenzó el lunes, cuando Sao Paulo se contagió
del entusiasmo que predominó en los mercados externos y el índice
Ibovespa subió el 0,73 por ciento, lo que además sirvió para
interrumpir una secuencia de dos sesiones negativas.
La mayor plaza por volumen negociado de América Latina reaccionó
positivamente a la divulgación del índice de ventas de inmuebles
usados en Estados Unidos durante el mes de octubre, que subió el
10,1 por ciento, bien por encima del 2,3 por ciento calculado por
los analistas.
Las cifras positivas continuaron el martes, cuando el Ibovespa
remontó al final una volátil sesión para cerrar con un avance del
0,76 por ciento.
El día había empezado con toma de ganancias por el mal humor que
llegaba desde Wall Street y empeoró cuando se conoció la noticia de
que el Producto Interior Bruto (PIB) de Estados Unidos creció a una
tasa anualizada del 2,8 por ciento en el tercer trimestre del año,
siete décimas menos de lo anunciado previamente.
Aunque en el peor momento del día la plaza paulista llegó a caer
un 1,25 por ciento, poco antes de la media sesión los inversores se
lanzaron a las compras a pesar de los cierres con leves pérdidas en
las bolsas europeas y la caída del precio del petróleo, elemento que
suele arrastrar al parqué paulista.
La tercera jornada consecutiva de repuntes se dio el miércoles,
día en que la plaza subió un 0,89 por ciento para marcar el máximo
de los últimos 17 meses animada por la subida del petróleo y por el
buen humor llegado desde Wall Street.
Sin embargo, el auténtico terremoto desatado en el emirato de
Dubai, y que se sintió en los mercados de casi todo el mundo,
también repercutió en la plaza brasileña, que perdió un 2,25 por
ciento en la sesión.
La petición del Emirato de pedir una moratoria para su "holding"
Dubai World, responsable de algunos de los proyectos inmobiliarios
más extravagantes del mundo, llevó a los inversores de todo el mundo
a optar por la cautela.
Con Nueva York cerrado por el festivo del Día de Acción de
Gracias, el miedo al colapso del opulento Estado árabe, muy
castigado por la crisis, también inundó de pesimismo a los
inversores de Sao Paulo.
En lo que va del año, el parqué brasileño registra ganancias del
78,65 por ciento, mientras que el interanual presenta un saldo
acumulado del 85,26 por ciento positivo.
Para el mes, la plaza tiene un ascenso del nueve por ciento.
En el mercado cambiario, el real se apreció hoy un 0,34 por
ciento frente al dólar, que cerró la última sesión de la semana
cotizado en el tipo de cambio comercial a 1,742 reales para la
compra y 1,744 para la venta.
En la semana, la moneda local se depreció el 0,58 por ciento,
mientras que para lo que va del mes la subida del real ha sido del
0,74 por ciento.
Para el acumulado de 2009, la moneda brasileña tiene una
apreciación del 25,15 por ciento con respecto a la divisa
estadounidense, mientras que desde el 27 de noviembre de 2008 la
denominación local registra ganancias del 23,54 por ciento. EFE