Madrid, 7 jul (EFE).- La bolsa española bajó hoy un 0,08 % y perdió la cota de los 10.200 puntos, pese a la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de que aceptará la deuda soberana portuguesa como garantía.
El efecto de la decisión del BCE fue momentánea en el mercado de renta variable español y, al final de la sesión, el principal selectivo de la bolsa española, el IBEX 35, perdió lo recuperado en la sesión y retornó a la senda bajista de las anteriores sesiones.
Así, este selectivo cayó 8,30 puntos, el 0,08 %, hasta los 10.196,20 puntos, mientras en Europa las principales plazas europeas capeaban la volatilidad con más éxito que el mercado español.
El apoyo del BCE a Portugal no bastó para que el IBEX 35 cerrase en positivo, ya que al final de la jornada perdió todo lo ganado en la sesión bursátil.
La jornada en la Bolsa española comenzó con la vista puesta en diferentes escenarios de los que dependía si se ponía o no fin a la tendencia bajista que había llevado a la bolsa española a tres jornadas previas consecutivas en negativo.
La subasta de letras en España, en la que el Tesoro logró colocar los 3.000 millones de euros previstos, posibilitó la recuperación del IBEX 35, que había empezado la jornada en números rojos, y limitó la caída del selectivo al 0,13 % al mediodía.
La decisión del BCE de continuar prestando liquidez a Portugal llevó a las bolsas a tornar a números positivos.
Los temores que provocó la decisión fueron disipados por el presidente del BCE, Jean Claude Trichet, que anunció que elimina el requisito del "rating" para el país luso, por lo que las entidades portuguesas seguirán recibiendo financiación del BCE.
Minutos después de que Trichet anunciara el apoyo a Portugal, la Bolsa española llegó a repuntar más de un 1 %.
La medida fue anunciada por Trichet en la rueda de prensa posterior a una reunión en la que el BCE decidió subir los tipos de interés de la zona euro hasta el 1,5 %, desde el 1,25 % previo, una medida que pretende frenar la inflación, aunque puede limitar el crecimiento de los países con más dificultades.
Además de la apuesta firme del BCE por apoyar a Portugal, el otro factor que impulsó la recuperación de las bolsas europeas fue la apertura en positivo de Wall Street, tras conocerse buenos datos de empleo en Estados Unidos.
La jornada estuvo marcada por la volatilidad, ya que el selectivo llegó a superar los 10.350 puntos, animado por la decisión del BCE y los datos de EE.UU, para acabar cerrando por debajo de los 10.200 puntos.
Así, en Europa, con el euro a 1,43 dólares, las principales plazas europeas aguantaron mejor que la española la volatilidad de la sesión; París subió el 0,58 %; Fráncfort, el 0,54 % y Londres, el 0,86 %. mientras que Milán cayó el 0,24 %.
Los grandes valores de la Bolsa española se repartieron entre las ganancias y las pérdidas: Santander subió el 0,18 %; Telefónica, el 0,09%, e Iberdrola, el 0,66 %, mientras que BBVA cayó el 0,26 & y Repsol YPF el 1,35 %.
En el IBEX 35, la mayor caída fue para Ebro Foods, que cayó el 2,32 %, seguido de Iberdrola Renovable, que perdió el 1,59 % en el penúltimo día de la "eléctrica verde" en el selectivo.
En el lado de las ganancias, la mayor subida fue para Sacyr Vallehermoso, que ganó el 2,21 %, acompañado de Amadeus, que ganó el 2,07 %.
En el mercado continuo, la mayor caída fue para Metrovacesa, que retrocedió el 5,91 %, seguido de Montebalito, que perdió el 4,91 %.
En la parte alcista de la jornada, DIA se apuntó la mayor subida, tras rebotar fuertemente y revalorizarse el 12,31 %, acompañada de Reno de Medici, que subió un 7,41 %. EFE