Bruselas, 22 jul (EFE).- La Comisión Europea (CE) ha propuesto
hoy medidas leves para paliar la crisis del sector lácteo, pero ha
rechazado cualquier reducción de la producción o cambio que suponga
una marcha atrás en la subida y desaparición de las cuotas lecheras.
El Ejecutivo comunitario ha presentado su informe sobre la
situación del mercado lácteo, al que se comprometió en vista de los
debates de la UE sobre la delicada situación de los ganaderos y en
reacción a las múltiples manifestaciones en países como España.
En el estudio, Bruselas ofrece la continuidad de las ayudas
actuales y alguna medida para facilitar que los Gobiernos apoyen a
los ganaderos, pero dictamina que la solución a esta crisis no está
en "suspender" las decisiones de la UE sobre el incremento de las
cuotas y su eliminación en 2015.
Los Veintisiete acordaron la subida de las cuotas (1% anual) y su
supresión posterior, dentro de la reforma de la Política Agrícola
Común (PAC).
La comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel, ha
afirmado, en rueda de prensa, que reabrir el debate sobre dichos
cupos "sólo crearía incertidumbre y no ayudaría a resolver la
situación".
Fischer Boel considera que no se debe culpar de la crisis al
aumento de cuotas, pues en la actualidad la producción de leche de
la UE está un 4,2 por ciento por debajo de los contingentes totales
e incluso ha apuntado que una rebaja de estas cantidades dañaría al
consumidor.
Además, ha apuntado que no hay consenso entre los Veintisiete y
que una reducción de la producción supondría acordar
"compensaciones" para algunos países: "No hay dinero", ha añadido.
Sin embargo, la CE ha propuesto que los Gobiernos que quieran
"frenar" su producción lechera apliquen individualmente la multa al
ganadero que se exceda en su cuota; en la actualidad, las sanciones
por superar el cupo nacional se imponen por igual a todos los
productores de un país.
Otra idea planteada por la CE es emplear el dinero obtenido por
las penalizaciones cuando se superan las cuotas para financiar el
abandono voluntario.
La Comisión admite que los precios de la leche pagados al
ganadero están por debajo de los registrados hace nueve años y en un
año han pasado de los 40 a 20 ó 21 céntimos por litro.
Bruselas insiste en que sean los Gobiernos quienes usen las
medidas disponibles para apoyar a su sector.
En este sentido, Bruselas ha planteado cambiar las reglas sobre
ayudas de Estado, de manera que los Gobiernos puedan otorgar una
prima de hasta 15.000 euros por ganadero, hasta 2010.
Esta opción beneficiará a todos los agricultores y ganaderos, no
sólo a los de leche, con el fin de paliar la falta de liquidez por
la crisis.
En la actualidad, el límite de ayudas de Estado sin justificar a
Bruselas está en 7.500 por explotación agrícola en un período de
tres años.
La Comisión ha reconocido que existen prácticas de supermercados
como acuerdos o anuncios sobre la venta de leche barata para atraer
clientes, lo que perjudica al consumidor, pero el principal
"perdedor" es el ganadero, según la comisaria.
No obstante, Fischer Boel ha lamentado que el propio comprador no
esté concienciado de lo que cuesta al ganadero producir leche y que
quiera adquirirla pagando menos que por la "coca-cola".
Bruselas se ha comprometido a estudiar los márgenes de beneficios
y las relaciones entre productores, distribuidores y comercio,
dentro de otros informes que prepara sobre los precios de los
alimentos.
Los ministros de Agricultura de la UE debatirán sobre el
documento presentado hoy en un Consejo extraordinario que se
celebrará el 7 de septiembre. EFE