Bruselas, 15 oct (EFE).- El Tratado de Libre Comercio (TLC)
rubricado hoy por Corea del Sur y la Unión Europea (UE) incluirá
salvaguardas que velen por el equilibrio en las exportaciones e
importaciones de vehículos entre ambos mercados, dijo hoy la
comisaria europea de Comercio, Catherine Ashton.
"Somos conscientes de las preocupaciones de los fabricantes
europeos de vehículos", explicó la comisaria en una rueda de prensa.
Para tranquilizarlos, se han incorporado al texto dos cláusulas
que evitarán posibles desequilibrios en la balanza comercial
bilateral.
El acuerdo alcanzado hoy implicará la supresión en tres años de
los aranceles a los vehículos con motores de más de 1,5 litros,
mientras que los que gravan a los de menor cilindrada se suprimirán
en cinco años.
Desde la Asociación Europea de Constructores de Automóviles
(ACEA), denuncian que el pacto provocará desajustes en la
competencia y piden a los Estados miembros que no ratifiquen el
texto que, en principio, debería entrar en vigor el año que viene.
Antes, tendrán que dar su visto bueno que el Consejo de la UE y
el Parlamento Europeo, pero la comisaria aseguró que ha estado en
contacto con los socios de la UE durante las negociaciones para
apaciguar sus preocupaciones.
Según los fabricantes europeos de vehículos, el tratado va contra
los intereses de la mayoría de las compañías europeas y de sus
millones de empleados.
Una de las cláusulas previstas en el TLC y que, según Ashton
velará por el equilibrio en la balanza comercial, prevé la posible
introducción de un límite máximo de exportaciones de componentes de
vehículos fabricados en terceros países.
Pero esta salvaguarda no satisface a la ACEA, que teme que será
"muy difícil de implementar" porque no entrará en vigor hasta cinco
años después de la firma del acuerdo.
Por tanto, se lamentan los fabricantes en un comunicado, se
abrirán las puertas a importaciones más baratas de China u otros
países asiáticos.
Desde la Comisión recuerdan que en la actualidad el número de
piezas extranjeras que Corea del Sur incluye en sus automóviles es
"extremadamente pequeño" pero, en el caso de que éstas aumenten
significativamente, el acuerdo prevé el establecimiento de un tope
máximo.
Respecto a la segunda cláusula incluida en el Tratado, Ashton
afirmó que facilitará la reintroducción de los aranceles que
actualmente gravan las importaciones (Corea del Sur carga con un 8%
a los vehículos europeos y la UE con un 10% a los surcoreanos) si se
detectan desajustes en la cuota de mercado de automóviles.
La comisaria ha subrayado la importancia de este pacto que
reducirá prácticamente la totalidad de aranceles y de barreras no
arancelarias entre ambas economías.
El acuerdo se traducirá, según Bruselas, en 19.000 millones de
euros en nuevas oportunidades comerciales para los exportadores
europeos.
En el apartado agrícola, la comisaria recalcó las "enormes
ventajas" que reportará la supresión de aranceles al sector agrícola
europeo, que en estos momentos ingresa 1.000 millones de euros
gracias a las importaciones surcoreanas.
Otras áreas como la propiedad intelectual, la contratación, la
política de competencia y comercial, así como el desarrollo
sostenible y el sector servicios, se verán también impulsadas
gracias a este pacto.
En 2008, el comercio entre Corea del Sur y la UE movió 65.000
millones de euros, si bien, según aseguró recientemente en Seúl el
ministro británico de Empresa, Peter Mandelson, se calcula que pueda
crecer hasta en un 20 por ciento tras la entrada en vigor del TLC.
EFE