Río de Janeiro, 9 jun (EFE).- La inflación en Brasil desaceleró
en mayo hasta el 0,43% y acumuló un alza del 3,09% en lo que va de
año, informó hoy el Gobierno.
La subida de precios fue inferior a la del mes anterior (0,57%),
pero la suma de los cinco primeros meses del año supera con holgura
el 2,20% registrado en el mismo periodo del año pasado, según el
boletín del estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística
(IBGE).
En los últimos doce meses del año la inflación descendió
levemente hasta el 5,22%, cifra que se ubica por encima de la meta
oficial del 4,5% para 2010, pero que aún está dentro del margen de
dos puntos de tolerancia que admite el Gobierno.
En mayo, los alimentos moderaron su subida de precio (1,15%) y
permitieron la mejoría del índice general. Las subidas de la energía
eléctrica (1,23%) y la bajada de los combustibles (-1,23%) también
contribuyeron para amenizar los precios.
Las tendencias inflacionistas son uno de los efectos adversos de
la pujanza de la economía brasileña, que en el primer trimestre
creció un 9,0% con respecto al mismo período del año pasado.
Uno de los principales factores en los que se apoya el
crecimiento de Brasil es el consumo de las familias, que entre enero
y marzo saltó un 9,3%, lo que contribuye a empujar los precios al
alza.
Por ello, la gran mayoría de analistas del mercado coincide en
que el Banco Central va a anunciar hoy una nueva subida de los tipos
de interés, que son del 9,50% anual, para frenar estas tendencias
inflacionistas.
La idea más extendida es que la autoridad monetaria opte por
aplicar una subida de tres cuartos de punto, la misma magnitud que
el pasado abril, cuando se celebró su última reunión.
En el 2009 Brasil registró una inflación del 4,31%, cifra
ligeramente inferior a la meta que manejaba el Gobierno, que al
igual que este año era del 4,5%. EFE