Madrid, 6 feb (EFE).- El temor a que Grecia, España y Portugal no
puedan financiar sus elevados déficit hizo tambalear a las bolsas
del viejo continente, que cerraron la semana con caídas comprendidas
entre el 2 y el 7%.
El mayor desplome fue el de Madrid, del 7,7%, seguido del de
Milán, que se dejó el 4,93%.
También fueron abultados los descensos de París, del 4,70%, de
Fráncfort, del 3,11%, y de Londres, del 2,46%.
Al inicio de la semana no se presagiaban esos malos resultados,
ya que los parqués registraban alzas.
Sin embargo, todo se trastocó a partir del miércoles, cuando el
comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, dijo
que Grecia, Portugal, España y otros países comparten ciertos
problemas estructurales, como una pérdida constante de
competitividad así como un elevado déficit público.
El jueves, un día después de la advertencia de Almunia, la Bolsa
de Madrid se desplomaba el 5,94%, su mayor bajada en una sesión
desde inicios de noviembre de 2008.
Esta reacción histérica, como la calificaron algunos analistas,
contagió al resto de parqués europeos, que también volvieron a los
niveles de noviembre.
Así, Fráncfort bajó el 2,45%, Milán cedió el 3,45% y Londres, el
2,16%, como consecuencia de los desequilibrios en las cuentas de los
gobiernos de la zona euro y el empeoramiento del mercado laboral.
Del estado de las cuentas en la zona euro dio cumplida
información el jueves el presidente del Banco Central Europeo (BCE),
Jean-Claude Trichet, que recordó a los países integrantes los
compromisos del Pacto de Estabilidad y Crecimiento y que deben
reducir paulatinamente el déficit fiscal hasta el 3% del Producto
Interior Bruto (PIB).
Según dijo, hay "muchos" países de la zona euro en dificultades,
lo que provocó que los buenos resultados presentados por algunas
entidades financieras, como el alemán Deutsche Bank o el español
Banco Santander, quedaran en un segundo plano.
Los azotes de la bolsa también afectaron al mercado de divisas,
donde el euro se depreció el jueves hasta situarse por debajo de los
1,38 dólares, cifra que no alcanzaba desde junio de 2009.
Con el viernes llegó una relativa calma, que, sin embargo, no
permitió a las bolsas europeas cerrar en positivo.
Londres perdió un 1,53%, Fráncfort un 1,79%, París un 3,40% y
Madrid un 1,35%. EFE