Manila, 30 ene (EFE).- Las plazas bursátiles de Asia cerraron la
semana y el primer mes de 2010 con pérdidas, que lideraron los
parqués chinos de Shanghái y Hong Kong, al presentar contracciones
de casi un ocho por ciento en el terreno mensual.
El índice general de Shanghái (acciones convertibles y no
convertibles) se situó el viernes a 2.989,29 enteros, con un
descenso semanal del 4,45 por ciento respecto de los 3.128,59 de
siete días atrás, y una caída del 7,84 por ciento comparada con su
primer cierre del año.
El índice Hang Seng de la región administrativa especial de Hong
Kong terminó el mes a 20.121,99 unidades, con un retroceso semanal
del 4,86 por ciento, mientras que el resultado mensual alcanzó una
disminución equivalente al 7,84 por ciento.
Las medidas del Gobierno por controlar la inflación, con temores
a nuevas subidas en los tipos de interés junto a los aumentos de los
coeficientes de caja exigidos a los bancos, sirvieron para mantener
apartados a los inversores de los parqués chinos.
El índice general MSCI Asia-Pacífico, considerado el termómetro
bursátil de la región, concluyó el viernes en 116,83 puntos, con un
descenso del 4,54 por ciento, en su segunda semana consecutiva a la
baja.
Este marcador referencial cerró enero con unas pérdidas del 4,25
por ciento respecto a los 122,02 puntos en los que se situó en su
primera sesión del año.
A la cautela inversora que motivan las medidas en China para
controlar la liquidez y los planes por restringir la actividad
bancaria en EEUU, se sumaron esta semana la difusión de flojas
previsiones de resultados en empresas estadounidenses y temores a un
retraso en la recuperación económica mundial ante dificultades
financieras en Grecia y Portugal.
En Tokio, la plaza financiera más importante de la región, el
índice Nikkei cerró con pérdidas en cuatro de sus últimas cinco
sesiones, para colocarse el viernes a 10.198,04 puntos, con una
caída semanal del 3,71 por ciento.
El selectivo Topix, que recoge las cotizaciones de todos los
valores de la primera sección, terminó enero a 901,12 unidades, con
un bajón mensual del 4,23 por ciento.
La semana bursátil tokiota ha estado guiado por las oscilaciones
en la cotización del yen frente al dólar, la política monetaria en
China, los anuncios de resultados empresariales y los planes para
los bancos del presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
Según manifestaron analistas japoneses esta semana, la
incertidumbre acerca del plan financiero de Obama se mantendrán
hasta que el presidente norteamericano presente ante el Congreso los
detalles de su iniciativa, lo que se espera ocurra a principios de
febrero.
Los agentes de bolsa en Tokio están también a la espera de que
las grandes multinacionales japonesas comiencen estos días a
divulgar sus resultados trimestrales.
En la bolsa de Séul, el índice Kospi cayó arrastrado por el
sector tecnológico, las tensiones militares con Corea del Norte tras
una escaramuza entre navíos de ambos territorios, además de por las
preocupaciones sobre las economías de China y EE.UU.
El selectivo surcoreano aparcó el viernes a 1.602,43 puntos, con
unas pérdidas semanales del 4,86 por ciento, que lo llevaron a
terminar el mes con una contracción del 5,52 por ciento.
Entre las otras plazas de la región destaca la bolsa de Yakarta,
que terminó la semana con avances, aunque sólo del 0,02 por ciento,
al situarse el índice JCI a 2.610,80 enteros, mientras que para el
periodo mensual logró un crecimiento del 1,37 por ciento.
También logró cifras positivas el selectivo VNIndex de la bolsa
saigonesa, que se expandió un 0,92 por ciento durante la semana y
cerró a 481,96 enteros, aunque en el cómputo mensual queda entre los
peores de Asia con unas pérdidas del 6,79 por ciento.
El índice Straits Times de la plaza de Singapur cerró a 2.745,35
(-2,64% semanal); el KLCI malasio quedó a 1.259,16 (-3,18%); el PSE
filipino a 2.953,19 (-2,32%); y el SET tailandés a 699,55 (-2.04%).
EFE