Berlín, 23 jul (EFE).- El fabricante de equipos de
telecomunicaciones sueco Ericsson registró en el segundo trimestre
del año un descenso de ventas del 8 por ciento, en comparación con
el mismo periodo del año anterior, aunque el volumen de beneficios
creció, impulsado por los resultados de su filial Sony-Ericsson.
Según las cifras publicadas hoy por el consorcio, desde
Estocolmo, el volumen de ventas se situó en el segundo trimestre del
año en los 48.000 millones de coronas suecas (5.100 de euros),
frente a los 52.100 millones del mismo periodo de 2009 (5.500
millones de euros).
El volumen de ventas acumulado en el primer semestre del año fue
de 93.100 millones de coronas suecas (9.897 millones de euros),
frente a los 101.700 millones del mismo periodo de 2009 (10.811
millones de euros), que supuso asimismo un descenso del 8 por
ciento.
Las ganancias netas trimestrales, en cambio, subieron de los 800
millones de coronas de entonces (85 millones de euros) a los 2.000
millones (212 millones de euros).
En total, en el primer semestre los beneficios se situaron así en
los 3.300 millones de coronas suecas (350 millones de euros), frente
a los 2.600 millones (27 millones de euros) de ese mismo periodo del
año anterior.
El presidente del consorcio, Hans Vestberg, atribuyó el descenso
de las ventas a la persistente reticencia a invertir en nuevos
equipos, lo que ha producido un "impacto negativo" en el conjunto
del grupo.
A ello se unen los problemas sufridos por Ericsson en los
suministros de componentes.
Esta evolución quedó, sin embargo, compensada en las ganancias
del grupo, gracias a los resultados de su filial sueco-japonesa Sony
Ericsson, cuyo beneficio neto acumulado en los seis primeros meses
fue de 33 millones de euros, frente a una pérdida de 505 millones en
el mismo período de 2009, según los resultados dados a conocer la
semana anterior. EFE