París, 10 sep (EFE).- Los diputados franceses aprobaron hoy el
retraso de la edad de jubilación de 60 a 62 años, gracias a los
votos de la mayoría conservadora, muy superiores a los de la
oposición de izquierda.
De esta forma, da el primer paso el punto más polémico de la
reforma de las pensiones planeada por Nicolas Sarkozy y que ha
despertado una gran oposición entre los sindicatos, que han
convocado numerosas huelgas para mostrar su oposición.
La próxima tendrá lugar el próximo día 23, después de que el
pasado martes 2,5 millones de personas se manifestaran en todo el
país según cálculos sindicales, una cifra que el Gobierno sitúa en
poco más de un millón.
Pese a esa protesta, Sarkozy anunció su intención de seguir
adelante con el punto estrella de su plan de reforma de las
pensiones y hoy los diputados lo aprobaron gracias a los votos de la
gubernamental UMP y de sus socios centristas.
La oposición de izquierdas, ampliamente minoritaria en la cámara,
votó en contra y el Partido Socialista (PS) anunció que volverá a
situar la edad mínima de jubilación en los 60 años si alcanza el
poder.
Si en ese punto los socialistas lograron el apoyo del resto de
los partidos de izquierda, no sucedió lo mismo en lo que se refiere
a sus planes sobre las pensiones, en particular su idea de
incrementar el tiempo mínimo de cotización para cobrar el total de
la jubilación, una idea a la que se oponen los comunistas. EFE