Río de Janeiro, 28 dic (EFE).- El presidente de Brasil, Luiz
Inácio Lula da Silva, afirmó hoy que su Gobierno pretende
"intensificar" la apertura de nuevos mercados para las exportaciones
brasileñas en 2010.
"Necesitamos intensificar la apertura de nuevas áreas de comercio
para Brasil, sobre todo en el mundo asiático, en Oriente Medio, en
los países africanos y en América Latina como un todo", dijo Lula en
el programa de radio Café con el Presidente.
La crisis económica mundial cambió la composición de la balanza
comercial brasileña puesto que sus clientes más tradicionales, como
Estados Unidos y la Unión Europea, experimentaron bruscas caídas en
sus pedidos.
Estados Unidos, que durante décadas fue el principal socio
comercial de Brasil, cedió este puesto a China después de dejar de
comprar el 47,2% de su cuota, según la balanza comercial consolidada
oficial, con datos entre enero y septiembre de 2009.
El descenso de la Unión Europea también fue acentuado, del 29%, y
se convirtió en la segunda región importadora de productos
brasileños por detrás de Asia, que ha tomado el relevo gracias al
gigante regional.
China ahora es el primer comprador de productos brasileños, con
un 14,5% de la cuota total y un fuerte aumento del 18,3% en los
nueve primeros meses de 2009.
Brasil ha disminuido sus ventas a todas las regiones del mundo
excepto a Asia, con mermas del 13,3% en África, del 45,1% en Europa
Oriental, del 6,5% en Oriente Medio y una brusca caída del 36% en
América Latina y el Caribe, región que absorbe una quinta parte de
las ventas externas del país.
En la región destacó la retracción de Argentina, tercer cliente
global de Brasil y su principal socio en el Mercosur, que dejó de
comprar el 39,9% de su volumen de importaciones de su vecino del
norte.
En su alocución radial, Lula manifestó que la recuperación de los
mercados externos, junto al consumo interno y los programas de
inversión patrocinados por su Gobierno van a permitir que Brasil
entre en 2010 en una situación "confortable".
"Soy más optimista que cualquier ciudadano brasileño, creo que
nunca estuve tan optimista como ahora. Vamos a prepararnos y a
trabajar porque lo que importa ahora es mucha cautela, aunque mucha
osadía", afirmó el mandatario.
Lula reiteró que el país "no va a parar más" y en los próximos
años se va a transformar "en la sexta, quinta o cuarta" economía del
mundo. EFE