Washington, 5 oct (EFE).- El presidente de EE.UU., Barack Obama,
pidió hoy horarios flexibles, cuidado para niños en sitios de empleo
y otras medidas que ayuden a los hombres y mujeres que trabajan
fuera del hogar, para promover la competitividad económica del país.
Durante un discurso ante la Cumbre de las Mujeres Más Poderosas,
organizada por la revista Fortune, Obama dijo que aunque la
estructura actual de los sitios de trabajo afecta de forma
desproporcionada a las mujeres, la flexibilidad en los horarios no
es un asunto sólo para mujeres.
Según Obama, muchos hombres "desearían tener la flexibilidad para
ser mejores padres para sus hijos, o mejores hijos para sus padres
que envejecen", y las empresas que ofrecen flexibilidad laboral
pueden registrar una reducción en las renuncias y el ausentismo y un
aumento de productividad.
"Esto no es un asunto sólo para mujeres, ni es sólo un asunto del
equilibrio entre el trabajo y la familia. Es un asunto (que afecta)
la competitividad económica" del país, enfatizó el mandatario.
Por ello, Obama elogió que muchas compañías, algunas lideradas
por mujeres, están abriendo el camino con medidas como trabajo desde
casa a través de Internet, horarios flexibles y guarderías en sitios
de empleo.
"Mi administración está comprometida para apoyar esfuerzos como
estos, no sólo mediante inversiones en programas de licencias con
pago y créditos tributarios para cuidado de niños, sino también
haciendo que el Gobierno federal sirva de modelo para las políticas
que estamos alentando", aseguró el mandatario.
El Gobierno federal está creando "sitios de trabajo móviles y
horarios laborales flexibles, y estamos juzgando a los empleados por
sus resultados, no por el tiempo" que pasan en el trabajo, agregó
Obama.
Beneficios como esos, señaló, ayudan al Gobierno a atraer y
retener en su fuerza laboral a los mejores talentos, y mejorar los
servicios para el pueblo estadounidense.
El acto, en el auditorio Carnegie Mellon en Washington, contó con
la participación de líderes empresariales y miembros de la
Administración.
En su alocución, Obama salpicó su discurso con anécdotas sobre
las mujeres en su vida, al señalar en concreto su crianza con su
abuela materna, y la influencia de su madre, su esposa y sus dos
hijas.
A mitad de su discurso, el sello presidencial en el podio se cayó
al suelo estrepitosamente pero Obama, al principio sorprendido,
recurrió al humor para salvar la situación.
"Está bien, todos ustedes saben quién soy. Pero estoy seguro de
que alguien allá atrás está verdaderamente nervioso, ¿no lo creen?,
están sudando la gota gorda ahora mismo", dijo Obama, provocando
risas con cada frase. EFE