Buenos Aires, 26 ago (EFE).- La opositora Unión Cívica Radical
(UCR), la segunda fuerza parlamentaria en Argentina, denunció hoy
que el Gobierno administra mal Aerolíneas Argentinas, en proceso de
expropiación al grupo español Marsans.
"El Gobierno está llevando a Aerolíneas Argentinas a una muerte
natural, poniendo en riesgo miles de puestos de trabajo", dijo en
una rueda de prensa el titular de la UCR, Gerardo Morales.
El dirigente opositor aseguró que el Gobierno "malversa más de 80
millones de pesos (unos 20 millones de dólares) mensuales" que
destina a mantener operativa la línea aérea de bandera.
Según Morales, esta administración provocará "un déficit de 1.000
millones de pesos (260 millones de dólares) hasta fin de año", un
"despilfarro que tiene la corresponsabilidad de algunos sindicatos"
que representan a los trabajadores de la empresa.
Los representantes del radicalismo en el Parlamento adelantaron
que solicitarán la interpelación del ministro de Planificación
argentino, Julio de Vido, para que dé explicaciones sobre la
situación de la compañía, a la que definieron como "grave".
Morales, junto a otros dirigentes del radicalismo, presentaron a
la prensa un informe sobre el estado de Aerolíneas, con una flota
aún deficiente y gran cantidad de personal para operarla.
Según los datos que exhibieron los legisladores opositores, la
compañía perdió en el segundo trimestre del año cerca de 32,2
millones de dólares mensuales por "irregularidades en la
administración" de la empresa.
Para la UCR, es "mentira" que las líneas aéreas tengan que dar
pérdidas en el actual contexto de crisis global pues, según los
datos que presentaron, las brasileñas TAM y Gol cerrarán este año
con ganancias por 351 millones de dólares y 306 millones de dólares,
respectivamente, la chilena Lan obtendrá un beneficio de 166
millones de dólares, mientras que la panameña Copa, de tamaño
similar a Aerolíneas, ganará 197 millones de dólares.
Según el informe, el Estado derivó fondos por 2.320 millones de
pesos (600 millones de dólares) para mantener operativa la compañía
desde julio de 2008, cuando se hizo cargo de la administración de la
empresa, hasta julio pasado.
El Parlamento argentino aprobó en noviembre pasado una ley que
autoriza al Estado a expropiar Aerolíneas al grupo Marsans mediante
un juicio que se inició en febrero pasado y que aún no concluyó.
Mientras tanto, el Gobierno argentino negocia un acuerdo con la
europea Airbus para la provisión de aviones a Aerolíneas, convenio
clave para destrabar el conflicto con Marsans por la expropiación de
la línea aérea.
Se trata de un acuerdo tripartito por el que Marsans, a través de
una de sus subsidiarias, transferirá a Aerolíneas Argentinas un
contrato de compra a Airbus firmado en 2007.
A su vez, Airbus y Aerolíneas establecerán en un nuevo convenio
la cantidad, características y plazos de entrega de las aeronaves,
mientras que Marsans lograría que Airbus le devuelva la seña ya
abonada por el contrato y se libraría de un potencial juicio por
incumplimiento del contrato de compra con el fabricante europeo.
Con la recuperación de ese dinero, el grupo español levantaría la
reclamación que inició contra Argentina por la expropiación de
Aerolíneas ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias
Relativas a Inversiones (CIADI), una demanda que ese tribunal del
Banco Mundial ya aceptó tramitar y en la que Marsans podría llegar a
reclamar un resarcimiento por mil millones de dólares. EFE