Budapest, 26 abr (EFE).- Hungría está dispuesta a renegociar las
condiciones sobre el pago de su elevada deuda con la Unión Europea y
el Fondo Monetario Internacional (FMI), anunció hoy en rueda de
prensa en Budapest el próximo primer ministro, Viktor Orbán.
Orbán, que preside el partido conservador Fidesz, que logró ayer
una aplastante victoria en la segunda vuelta de las elecciones
legislativas en Hungría, admitió que el país "está sumergido en
deudas" y anunció su disposición a renegociar sus compromisos
financieros con la UE y el FMI cuando asuma el poder.
"Somos nosotros quienes debemos tener un nuevo plan", para
negociar la deuda, dijo Orbán, tras asegurar que el nuevo gobierno,
que él liderará con toda seguridad, tendrá como meta "un déficit del
cero por ciento", para lo que elaborará planes a largo plazo.
Los analistas creen posible que Hungría fije con el FMI una
reducción del déficit fiscal hasta el 5% para 2010, lo que
permitiría al nuevo gabinete aliviar los ajustes económicos y
devolver préstamos de 20.000 millones de euros para evitar la
bancarrota estatal.
Con este fin, Hungría recibió en octubre de 2008 créditos por
12.500 millones de euros del FMI, mientras que la UE aportará 6.500
millones de euros y el Banco Mundial otros 1.000 millones de euros.
Orbán calificó de prioridades de su gobierno para Hungría un
nuevo sistema impositivo para activar la economía, "la lucha contra
la burocracia" para reducir el gasto público y una redistribución
del poder para la administración local.
Para ello, el político conservador contará con una mayoría de dos
tercios en el Parlamento, que le permitirá realizar su programa sin
la necesidad de negociaciones con otras fuerzas políticas.
En las elecciones legislativas de ayer los votantes decidieron
apoyar al Fidesz con 263 de los 386 escaños del Parlamento, quedando
los socialistas, hasta ahora en el poder, en un lejano segundo
puesto con tan solo 59 diputados.
Está previsto el nuevo Parlamento se reúna antes de un mes y que
el presidente de la República nombre a Orbán como primer ministro.
EFE