Asunción, 13 sep (EFE).- La estatal paraguaya Petropar dejó de
percibir los envíos de gasóleo de la petrolera venezolana PDVSA tras
el vencimiento el 31 de julio pasado de un contrato de provisión que
está siendo renegociado, informó hoy un diario en Asunción.
Fuentes de la Petropar explicaron que los envíos del combustible
de la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) están pendientes
del resultado de unas negociaciones entre ambas partes para
establecer los términos de pago de una deuda contraída por Paraguay,
informó hoy el matutino Abc Color.
Una misión de PDVSA estuvo hace dos semanas en Asunción para
concertar la forma en que deben amortizarse los 269 millones de
dólares que le adeuda Petropar.
Hasta el momento, ambas partes no llegaron a un acuerdo,
atendiendo a que si bien Paraguay sostiene que debe pagar la deuda
contraída, alega que una parte de la misma no se ajusta a lo que se
había conversado inicialmente.
El Gobierno paraguayo sostiene que PDVSA aplica una tasa del 18
por ciento a gran parte de los atrasos de la deuda por provisión de
gasóleo, mientras que las autoridades de Petropar reconocen sólo una
punición del 2 por ciento.
Además, la estatal paraguaya plantea una rebaja de 37 millones de
dólares, monto que para las autoridades de Asunción representa la
diferencia de las facturaciones de origen de los embarques de
combustible, en Chipre, con la de la entrega, en el Río de La Plata,
desde donde son trasladados hacia Paraguay.
Las negociaciones en torno a la deuda se llevan a cabo luego de
que presidente paraguayo, Fernando Lugo, hablara personalmente del
asunto con su homólogo venezolano, Hugo Chávez, en el marco de la
cumbre extraordinaria de la Unión de Naciones Suramericanas
(Unasur), realizada en Bariloche (Argentina) el 28 de agosto pasado.
Venezuela es el principal abastecedor de gasóleo de Paraguay, que
no produce petróleo, y las autoridades de Asunción consideran
cruciales esas negociaciones para asegurar nuevos embarques de ese
combustible, que mueve el 80 por ciento del parque automotor
nacional.
El Gobierno de Lugo heredó en 2008 a Petropar en una situación de
quiebra técnica, con una obsoleta planta que redistribuye gasolinas
y gasóleo. EFE