París, 27 jul (EFE).- La presidencia de la República francesa
anunció hoy un "acuerdo de asociación estratégica" entre el grupo
nuclear público Areva y la eléctrica estatal EDF que prevé una
participación de ésta en el capital del gigante nuclear galo.
El anuncio se conoció al final de la reunión que mantuvo en el
palacio del Elíseo el Consejo de Política Nuclear y la presidencia
agregó que habrá una ampliación de capital de Areva de un máximo del
15% "antes de final de año" para financiar las inversiones
necesarias para el desarrollo de la industria nuclear francesa.
"Se examinará la eventualidad de una participación de EDF en el
capital de Areva", precisó el comunicado de la presidencia francesa,
donde se agregó que las decisiones alcanzadas hoy tienden a
"reforzar el sector nuclear francés".
Además, se anuncia que el acuerdo estratégico cubrirá "el
conjunto de los ámbitos de actividad de interés común" entre EDF y
Areva y que tendrá entre sus objetivos el de garantizar la seguridad
y aprovisionamiento de combustible.
En concreto, en el comunicado del Elíseo se indicó que ambos
grupos públicos se apoyarán mutuamente para facilitar la exportación
de reactores nucleares franceses, pero que el acuerdo no será
exclusivo y que las dos empresas podrán cooperar con otros grupos
del sector.
Esta decisión se conoce siete meses después de la gran decepción
que causó en Francia la decisión de los Emiratos Árabes Unidos (EAU)
de encargar al grupo surcoreano KEPCO la construcción de cuatro
reactores nucleares en ese país, licitación a la que aspiraba un
consorcio galo liderado por EDF.
En su comunicado de hoy, el Elíseo aseguró que el reactor de
tercera generación EPR, cuya tecnología han desarrollado empresas
francesas, "tiene un potencial muy importante en los mercados
internacionales" y alabó "el nivel de seguridad" de los reactores de
diseño y fabricación franceses.
Precisó que, "para mejorar de manera continua la competitividad
de ese reactor", se continuará con la optimización de su diseño y
construcción a la vista de la experiencia adquirida en aquellos
lugares donde se construye actualmente.
El reactor EPR, según recordó hoy mismo el diario "Les Echos",
"está considerado como el no va más en materia de seguridad (...)
pero se ha revelado como demasiado caro".
"Una unidad de 1.600 megawatios cuesta de media unos 5.000
millones de euros (unos 6.500 millones de dólares), frente a los
cerca de 5.000 millones de dólares de un reactor coreano de 1.400
megawatios. De ahí que duden incluso los países más ricos del
mundo", afirmó el diario económico.
En su comunicado, el Elíseo confirmó que continuarán los trabajos
de certificación del ATMEA, un reactor de potencia media que
desarrolla Areva con el fabricante japonés Mitsubishi. EFE