Bruselas, 7 ago (EFE).- La presidencia sueca de turno de la UE
negó hoy que se oponga a la construcción del gasoducto Nord Stream,
que conectará Rusia directamente con Alemania a través del mar
Báltico, pero aseguró que el proyecto sólo saldrá adelante si el
estudio de impacto medioambiental es positivo.
El consorcio Nord Stream, la empresa encargada de desarrollar el
proyecto, solicitó recientemente más tiempo para presentar la
evaluación de impacto, indicaron a Efe fuentes del Ministerio sueco
de Medio Ambiente.
La presidencia sueca espera recibir la información a más tardar a
principios de otoño, señaló uno de sus portavoces.
Suecia reconoce que el trazado del conducto -diseñado para cruzar
el mar Báltico y no atravesar el territorio de un tercer país-
preocupa por las consecuencias que pueda tener en la flora y la
fauna marina de la zona, pero evita anticiparse a los resultados del
estudio ambiental.
Si el proyecto supera esta fase y recibe el permiso para su
construcción, Alemania tendría línea directa con Rusia para importar
gas, algo que no todos los países de la UE ven con buenos ojos,
sobre todo por miedo a que la operación sitúe a Berlín en una
situación privilegiada.
Desde Alemania, sin embargo, se insiste en que el proyecto es una
manera más de reforzar la débil seguridad energética comunitaria
mediante la diversificación de fuentes de suministro. EFE