Shanghái (China), 6 ago (EFE).- El presidente ejecutivo de la
Corporación Nacional del Cobre de Chile (Codelco), Diego Hernández,
aseguró hoy a Efe que no se privatizarán los principales activos de
la empresa estatal en los próximos cuatro años, aunque sí habrá una
"reorganización" de la estructura de la compañía.
"No es intención de este Gobierno hacer cambios" que puedan
llevar a la privatización de los activos principales de la firma
(sus minas de Codelco Norte, Salvador, Andina y Teniente), por lo
que, "por lo menos en los próximos cuatro años, es un tema que
nosotros no vamos a discutir", explicó Hernández.
La privatización, según el presidente de Codelco, "no es una
condición fundamental" para hacer la empresa más competitiva, ya que
"creo que, con lo que tenemos hoy día, nuestra obligación es ser más
eficientes, ser más competitivos, y no creo que el hecho de que
seamos una empresa estatal sea una barrera para conseguirlo".
Sin embargo, sí señaló que habrá una "reorganización" que estará
finalizada "en los próximos meses" para cumplir los dos objetivos
principales de la compañía que, según Hernández, son ejecutar sus
nuevos proyectos para garantizar los niveles de producción actuales
y mejorar la competitividad.
El presidente de Codelco señaló que dentro de esa reorganización
entrará "tener un área más potente de administración y finanzas" y
un área de recursos humanos "más enfocada al recambio generacional y
la contratación de gente con talento", mientras que mantendrá el
departamento comercial sin grandes cambios.
"Hay una vicepresidencia que se dedica a la ejecución de
proyectos, a la que apoyamos sin cambios mayores", mientras que en
la organización de las divisiones en las minas quiere "tener un buen
equilibrio" entre su autonomía para cumplir sus planes de producción
y costes y un "marco más estandarizado" de funcionamiento.
Además, el presidente espera dar un mayor impulso a la parte
tecnológica y de innovación, ya que "Codelco ha hecho esfuerzos
importantes en desarrollo de tecnología, pero ahora tenemos que
'aterrizar' eso en aplicaciones concretas".
Para sus operaciones a medio plazo, Hernández tiene previsto
"empezar a construir alguna plataforma que nos sirva para
internacionalizarnos cuando tengamos oportunidad", con la compra de
minas en otros países, para lo que el presidente calcula que su
empresa estará preparada en unos tres años.
Hernández ha tenido toda esta semana en Shanghái encuentros con
proveedores chinos de equipamientos y con sus clientes en el gigante
asiático, su principal mercado.
"La situación (en China) se ve bastante sana", con "una demanda
de nuestro producto bastante firme y normal", aseguró Hernández.
"Creo que finalmente el consumo de cobre de China este año va a
ser superior al del año anterior", explicó el presidente, cuya
compañía prevé que el consumo del metal aumente un 4% en el mundo y
un 8% en China en los próximos 12 meses.
Hernández se mostró confiado en las previsiones de crecimiento de
la economía china para este año, en torno al 8%, aunque reconoció
que los meses de crisis en el sector, entre noviembre de 2008 y
marzo del 2009, fueron una "advertencia" de que pueden darse
situaciones en las que los precios lleguen a desplomarse.
"Eso nos hace ser más cuidadosos ahora con nuestras inversiones y
también con la obligación de preocuparnos de tener costos lo más
bajo posibles", aseguró.
En cuanto al mercado chino del cobre, Hernández señaló que sigue
creciendo y hay más flexibilidad que antes.
"Se han desarrollado 'traders' (intermediarios) locales que
compran cobre y que, a su vez, redistribuyen a clientes menores, que
no son clientes a los que nosotros podemos o debemos llegar",
explicó Hernández.
Además, "los pequeños o medianos consumidores también quieren
tener acceso a fijaciones de precios, para poder disminuir el riesgo
de la volatilidad del precio en sus negocios", aseguró.
Respecto a la creciente demanda en el gigante asiático, Hernández
concluyó que "no va a faltar cobre", aunque reconoció que "los
recursos hoy día son menos competitivos que los que teníamos antes"
porque "las leyes (pureza) de los yacimientos son más bajas y los
costos de las nuevas inversiones son más altas". EFE
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