Alejandra Linares-Rivas
Casablanca (Marruecos), 27 oct (EFE).- El buque español
Intermares de cooperación pesquera fue presentado hoy por primera
vez en el extranjero en el puerto de Casablanca, donde se ofreció a
las autoridades marroquíes para colaborar en la formación global del
sector pesquero, desde la captura hasta la distribución del
producto.
El Intermares, recién salido del astillero y cuyo primer destino
internacional ha sido Marruecos, fue concebido para ofrecer
"formación 'in situ' al sector", explicó a Efe el director general
de Estructuras y Mercados Pesqueros de la Secretaría General de
Pesca Marítima, Ignacio Gandarias.
El que por sus características, equipamiento y funciones es para
este representante del Gobierno español "probablemente una novedad
mundial", será una nueva plataforma en la que se centralicen
ejercicios que antes se realizaban en distintas sedes.
Gandarias y el embajador de España en Rabat, Luis Planas,
acudieron a Casablanca para presentar el proyecto al secretario
general marroquí de Agricultura y Pesca, Moha Marghi, quien destacó
la actual colaboración bilateral en la materia, gracias a los
acuerdos firmados con la Unión Europea.
Precisamente por esa "estrecha cooperación", aseguró Gandarias,
Marruecos es el primer país en el que se da a conocer el Intermares,
que permanecerá una semana atracado y a continuación viajará a
Mauritania, Senegal, Guinea Bissau y Cabo Verde, antes de volver a
Vigo, desde donde partirá en enero de 2010 para empezar a operar.
El barco trabajará en África y Latinoamérica y podrá permanecer
en cada uno de los países que demanden sus servicios entre 15 días y
dos meses, dependiendo de las necesidades, mientras que pasará en
España un período máximo de un mes al año.
La nave, de 79,20 metros de eslora y 15 de manga, puede albergar
19 tripulantes, 48 alumnos y hasta 10 profesores, que desarrollarán
sus actividades entre las cinco cubiertas del barco.
Gandarias indicó que la Secretaría General del Mar ha invertido
20 millones de euros en su construcción y que su vida útil podría
ser de entre 20 y 25 años, dado que no es un buque de faena, que
conlleva mayor desgaste, sino una escuela.
Serán los países receptores de este servicio quienes determinarán
sus necesidades y planificarán quiénes embarcan, pero, de entrada,
"se dará prioridad a los formadores de las escuelas, para después
admitir a otros alumnos e incluso a marineros experimentados",
señaló el español.
El barco dispone de aulas-taller para la instrucción en sanidad
marítima y enseñanza de la industria transformadora y elaboradora
del pescado, así como, entre otros, de los sistemas de empaquetado y
etiquetado.
Y facilitará además la formación de titulados náutico-pesqueros,
el entrenamiento de inspectores y observadores de pesca de terceros
países, la investigación científica y la enseñanza de técnicas de
salvamento.
Para todo ello, el buque, con una autonomía de 20.000 millas
(aproximadamente entre 45 y 50 días), cuenta con maquinaria
industrial de última generación y tiene además laboratorios, parque
de pesca, salas de reunión, embarcaciones auxiliares y otras
dependencias comunes como gimnasio, piscina o sala de estar.
Preparado para la navegación oceanográfica, otro de sus fines es
la protección del medioambiente marino, y con esa premisa en mente
se construyó con un sistema automatizado de tratamiento de las aguas
de lastres, que elimina las bacterias y plantas flotantes sin dejar
residuos contaminantes. EFE
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