Madrid, 1 oct (EFE).- Repsol se ha aliado con la energética china
Sinopec para explotar conjuntamente los proyectos de exploración y
producción que la compañía española posee en Brasil, operación que
dará lugar a la segunda petrolera privada más grande de
Latinoamérica por capitalización.
Para dar entrada a Sinopec, Repsol Brasil ampliará su capital en
unos 7.100 millones de dólares (unos 5.200 millones de euros), que
serán suscritos íntegramente por la petrolera china, que pasará así
a controlar el 40% de la sociedad, en la que la compañía presidida
por Antonio Brufau mantendrá el 60%.
De la unión, que supone valorar los activos brasileños de Repsol
en 10.664 millones de dólares (7.816 millones de euros), surgirá la
segunda mayor petrolera privada de Latinoamérica, con un valor de
17.773 millones de dólares (unos 13.027 millones de euros al cambio
actual), según la consultora especializada Evaluate Energy.
Por delante se sitúa OGX Petróleo y Gas Participaciones,
propiedad de un empresario brasileño y valorada en 31.800 millones
de dólares, mientras que el tercer lugar lo ocupa la argentina YPF,
controlada por Repsol y valorada en 17.207 millones de dólares.
Desde hace meses, Repsol barajaba distintas fórmulas para
financiar la explotación de sus descubrimientos de hidrocarburos en
Brasil, entre las que destacaban sacar a bolsa el 40% de la filial
brasileña o vender directamente esa participación a un socio
industrial.
Los fondos captados cubrirán la totalidad de las necesidades de
financiación de las inversiones previstas para el desarrollo de la
cartera de activos de Repsol Brasil, informó hoy la firma española a
la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Repsol y Sinopec, cuya alianza deberá recibir el visto bueno de
las autoridades competentes, continuarán con sus planes de expansión
en Brasil y participarán, conjuntamente o por separado, en futuras
rondas de licitación en el país.
Para el presidente de la petrolera española, Antonio Brufau, este
acuerdo reconoce la "gran creación de valor" que ha supuesto el
esfuerzo inversor de Repsol en la actividad de exploración,
particularmente en las formaciones presalinas en aguas marinas
brasileñas.
Brufau expresó su satisfacción por compartir el desarrollo de los
proyectos brasileños "con un socio de reconocido prestigio en el
sector como Sinopec" y subrayó que juntos podrán "ayudar a expandir
las relaciones empresariales" entre China y España.
Los analistas ven positiva la alianza de Repsol con la petrolera
china Sinopec, no sólo porque le ayudará a financiar la extracción
del crudo en Brasil y liberar así dinero para otras cuestiones como
el pago de dividendo, sino porque le abre la puerta a proyectos en
China.
Sinopec, una de las mayores empresas petroleras, gasísticas y
químicas de China y presente en 20 países, cuenta con una producción
anual de unos 350 millones de barriles equivalentes de petróleo
(bdp) y unas reservas probadas de 4.000 millones de bdp.
Según la revista estadounidense "Fortune", Sinopec (acrónimo en
inglés de Corporación Petroquímica de China) era en 2009 la novena
mayor empresa del mundo y la primera china.
El Gobierno chino posee un 75,84% de la compañía, que cotiza en
Hong Kong, Shanghai y Nueva York, mientras que el segundo mayor
accionista, con un 19,25%, es la sociedad estatal hongkonesa HKSCC.
Repsol es una de las compañías energéticas privadas líderes en
exploración y producción de Brasil, donde encabeza, junto a la
estatal Petrobras y BG, la actividad exploratoria en la prolífica
Cuenca de Santos, en el "presal" (formaciones salinas en aguas
profundas) brasileño.
La petrolera cuenta en el país con una importante y diversificada
cartera de activos, que incluye un campo productivo (Albacora
Leste), ocho descubrimientos y otros proyectos exploratorios y áreas
identificadas con potencial.
Entre los descubrimientos, destacan los campos de Guará, que se
calcula que acumula entre 1.100 y 2.000 millones de barriles de
crudo ligero de alta calidad y de gas natural (el equivalente al
consumo de dos años de España), y Carioca, donde los test arrojan
una producción de 2.900 barriles de crudo y 57.000 metros cúbicos de
gas al día. EFE