Pekín, 19 ene (EFE).- La organización Reporteros Sin Fronteras
(RSF) expresó a través de un comunicado su "indignación y gran
preocupación" tras los ciberataques contra las cuentas de correo
electrónico de Gmail, de varios periodistas extranjeros que trabajan
en China.
"A través de los periodistas extranjeros que trabajan en Pekín,
los hackers intentan probablemente obtener los contactos y la
información de activistas en defensa de los derechos que aceptan
hablar con la prensa", apuntó RSF.
Estas acciones "ponen en peligro a las fuentes e intimidan" a los
periodistas, además de constituir "un gran ataque contra su libertad
de informar, su vida privada y profesional", agregó la organización.
"Mi vida privada ha sido violada, y mucha gente ha sido puesta en
peligro tras esto. Es horrible", declaró a RSF un periodista que no
quiso revelar su identidad.
Ante esta situación, RSF exige explicaciones por parte del
Ministerio chino de Información y Tecnología.
Además, la organización ha colgado en su página web una guía en
la que ofrece consejos prácticos para ayudar a los internautas a
preservar su anonimato y esquivar la censura.
Por su parte, el Club de Corresponsales Extranjeros de China
(FCCC, siglas en inglés) señaló ayer a sus miembros que al menos dos
medios de comunicación extranjeros habían sido víctimas de hackers.
La FCCC, también ha informado a sus miembros sobre cómo saber si
sus cuentas han sido pirateadas, y pide a los periodistas que
presten atención a los enlaces a los que acceden, así como verificar
que sus ordenadores están bien protegidos contra los virus.
El anuncio se produce después de que la semana pasada la
multinacional de Internet Google asegurase que las cuentas de correo
de Gmail de disidentes políticos y de empresas estaban siendo
víctimas de un ciberataque por parte de China.
Google decidió replantearse su estrategia en China, donde está
presente desde hace cuatro años, al entender que no se están
cumpliendo los objetivos con los que se implantó en el país y que le
llevaron a transigir con la censura gubernamental.
El pasado jueves, el gigante de Internet anunció que hablaría con
las autoridades chinas sobre la posibilidad de operar un servicio de
búsqueda sin censura dentro de China y si eso fuera imposible,
entonces cerraría Google.cn.
China tiene la mayor población internauta del mundo, con cerca de
384 millones de usuarios, pero también es uno de los países más
censores con la red, según denuncian sistemáticamente las
organizaciones de derechos humanos. EFE