Bucarest, 12 may (EFE).- El primer ministro de Rumanía, Emil Boc,
pidió hoy a su Gobierno que baje en un 25 por ciento los salarios en
las empresas públicas, en el día en que los profesores han anunciado
una huelga general para el 31 de mayo contra los recortes salariales
conocidos la semana pasada.
A la medida propuesta hoy se sumará también un impuesto adicional
para aquellos que tengan más de dos propiedades, anunció Boc en el
consejo de Gobierno.
Mientras el Ejecutivo se reunía en Bucarest, cientos de jubilados
se manifestaban en ciudades de todo el país contra el recorte de las
pensiones en un 15 por ciento anunciado por el presidente Traian
Basescu la semana pasada.
En Bucarest, Iasi -noreste- y Galati -este- las fuerzas del orden
han intervenido para calmar los ánimos de los pensionistas.
Por su parte, los funcionarios, que como los jubilados verán
reducidos sus ingresos a partir del 1 de junio -en un 25 por ciento,
en su caso- ya han anunciado protestas masivas para el próximo 19 de
mayo.
Comprometida con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para
contratar un crédito exterior de 20.000 millones de euros el pasado
año, Rumanía debe acometer dolorosas reformas para mantener su
déficit público por debajo del 6,8 por ciento, el límite impuesto
por este organismo para 2010.
Del cumplimiento de las condiciones pactadas depende que Bucarest
reciba los más de 8.000 millones que aún debe ingresar del crédito.
EFE