Madrid, 3 feb (EFE).- El consorcio Grupos Unidos por el Canal
(GUPC), liderado por Sacyr, podría ganar hasta un máximo de 50
millones de dólares más (35,9 millones de euros), a razón de 215.000
dólares (154.000 euros) diarios, si acaba antes de lo previsto la
construcción del tercer juego de esclusas del canal de Panamá.
Durante la jornada el "Origen y Futuro del Canal de Panamá", el
presidente del grupo Sacyr, Luis del Rivero, explicó que la
Autoridad del Canal de Panamá (ATC) quiere que la inauguración del
tercer juego de esclusas coincida con el centenario de la puesta en
funcionamiento del canal el 15 de agosto de 2014.
Por esta razón el contrato de adjudicación de las obras incluye
un premio en caso de anticipación, así como una penalización si las
obras se retrasan de 300.000 dólares diarios (215.000 euros, hasta
un máximo de 54 millones de dólares (38,7 millones de euros).
Del Rivero destacó también el "gran honor" que para Sacyr supone
que su consorcio (en el que también están la italiana Impregilo, la
belga Jan de Nul y la panameña Cusa) venciera al formado por la
estadounidense Bechtel y la japonesa Mitsubishi, de las que recibió
felicitaciones, mientras que lamentó que algunos compatriotas
tacharan su oferta de temeraria sólo por "envidia".
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que participó en la
clausura de la jornada, reconoció que es "triste pero cierto" que la
envidia es "el principal pecado" de los españoles, si bien aseguró
que no es el caso de la ciudad de Madrid, que está orgullosa de que
Sacyr "haya tenido la encomienda de una obra tan fabulosa".
En este sentido, dijo que Sacyr es un "buen ejemplo" de que nada
es imposible y de que "por muy difícil que sea el reto y oscuro el
horizonte, cuando hay talento los objetivos se cumplen".
El alcalde provocó la risa en un auditorio compuesto sobre todo
por ingenieros cuando se confesó "atraído" por la obra pública, algo
-dijo- que ha permitido abrir en Madrid "un espacio de oportunidad"
que han sabido aprovechar las empresas del sector, de las que alabó
que hayan estado a la "altura tecnológica y de gestión" que la
transformación urbana de la capital requería. EFE