Investing.com -- El miércoles, los próximos datos del Índice de Precios al Consumo (IPC) de abril se anticipan como un indicador significativo para la trayectoria de la libra esterlina. Las expectativas del mercado, reflejadas por la curva Sonia, sugieren una relajación de 14 puntos básicos en junio y un recorte de 25 puntos básicos en agosto por parte del Banco de Inglaterra (BoE).
Los economistas predicen que la inflación de los servicios podría superar las previsiones del BoE, lo que podría desplazar la probabilidad de la reducción inicial de tipos a agosto en lugar de a junio. Esta valoración no está exenta de incertidumbre, ya que los próximos datos podrían influir notablemente en las predicciones del mercado sobre una bajada de tipos en junio.
Está previsto que el Gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, pronuncie un discurso mañana, que podría ofrecer más información sobre la perspectiva del banco central y los posibles ajustes de la política monetaria.
Si las cifras de inflación coinciden con las previsiones, se espera que la libra se fortalezca. Un escenario que refleje los movimientos del mercado de abril podría ver al par EUR/GBP caer por debajo del umbral de 0,8550, revirtiendo el repunte experimentado cuando superó 0,8600 y cayó hasta 0,8530. No obstante, una caída significativa del tipo de cambio EUR/GBP podría infravalorar la libra, especialmente si el Banco de Inglaterra opta por recortes de tipos más agresivos que el Banco Central Europeo de aquí a finales de año.
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