Bruselas, 3 mar (EFE).- La Confederación Europea de Sindicatos
(CES) y la Unión Europea de Trabajadores Cristianodemócratas (UETDC)
han reclamado hoy una mayor regulación de los mercados financieros
con vistas a "reforzar la dimensión social de la UE" y garantizar la
estabilidad de la economía comunitaria.
Para evitar una nueva crisis financiera en el futuro, la CES y la
UETDC consideran crucial "una regulación eficaz y global de los
mercados financieros", según afirman en una declaración conjunta
presentada en Bruselas.
"Aún estamos en una situación muy frágil, tal y como muestra el
caso de Grecia", afirmó el secretario general de la CES, John Monks.
Por ello, destacó la necesidad de crear "un marco más seguro para
el mercado" que refuerce la dimensión social de la UE, en una rueda
de prensa celebrada en la sede del Parlamento Europeo (PE) en
Bruselas, donde la Comisión Europea presentará hoy su propuesta de
estrategia económica comunitaria para la próxima década.
El mercado "no tiene un matiz social por sí mismo", por lo que
los poderes públicos "deben garantizar que éste respeta los
objetivos de bienestar común" y los derechos fundamentales
establecidos en el Tratado de Lisboa, según reza la declaración.
"En estos momentos se está librando una verdadera batalla entre
algunos elementos de los mercados financieros y los líderes
políticos", y en ella está en juego "si la democracia es capaz de
controlar a los mercados o si se sigue especulando", afirmó Monks.
"Algunos casinos están regulados de forma más estricta que
ciertos bancos", ironizó el secretario general de la CES.
En su declaración conjunta, los sindicatos proponen "volver a los
principios de la creación de la economía social de mercado, basada
en interlocutores sociales sólidos y corresponsables".
Subrayan que las libertades económicas en la UE "no deben tener
prioridad sobre los derechos sociales fundamentales", y por ello
sugieren la introducción de "una cláusula de progreso social" en la
ley primaria.
De este modo, se podrán alcanzar los objetivos de crecimiento
duradero, pleno empleo, progreso social, bienestar y protección
social, continúa el texto.
Como propuestas concretas para mejorar la protección social en la
UE, los sindicatos reclaman una nueva directiva de tiempo de
trabajo, más medidas para lograr la igualdad salarial entre hombres
y mujeres o una mayor protección contra los despidos y de la madre
trabajadora, entre otras.
Tras el impacto de la crisis financiera internacional, los
sindicatos "no se sienten en una posición más fuerte en Bruselas",
dijo Monks, quien no obstante señaló que "la relación de fuerzas
está cambiando".
El avance del paro en la UE "ha hecho a muchos trabajadores
replantearse las cosas por primera vez en 30 años", lo que supone
"una oportunidad para mejorar el equilibrio en nuestras sociedades",
comentó. EFE