Madrid, 6 ago (EFE).- La agencia de medición de riesgos Standard
& Poor's ha decidido mantener la calificación crediticia de
Telefónica tras el acuerdo alcanzado con Portugal Telecom para la
compra de su mitad de Brasilcel, que le supondrá controlar la
brasileña Vivo.
Según informó hoy la agencia, la calificación crediticia de
Telefónica se mantiene en A- para la deuda a largo plazo y A-2 para
la deuda a corto, aunque con perspectiva negativa para ambos y para
su filial checa, porque la deuda ajustada representará, tras la
operación, alrededor de 2,5 veces el resultado bruto de explotación
(Ebitda) de la compañía.
Standard and Poor's advirtió en su informe que bajará los niveles
de la operadora española si su deuda supera en 2,5 veces el Ebitda o
si prevé que vaya a traspasar ese límite antes de finales de 2011.
Esto sucederá si los ingresos de Telefónica no crecen de forma
significativa en 2011, si se endeuda para realizar nuevas
adquisiciones o si el mercado de cambio de divisas evoluciona de
forma desfavorable.
La agencia señaló que, aunque es probable que el apalancamiento
de Telefónica crezca de forma significativa como resultado de la
compra de parte de Brasilcel, también generará un flujo de caja
adicional capaz de soportar el endeudamiento.
S&P añadió que el control total de Vivo dará a la operadora
española una gran solidez en el mercado brasileño de telefonía móvil
y consolidará su posición en el país, donde también cuenta con
negocios de líneas fijas.
Después de casi tres meses de negociaciones, Telefónica alcanzó
el pasado 28 de julio un principio de acuerdo con Portugal Telecom
para hacerse con el control de Vivo, a través de la venta de la
participación de la portuguesa en la operadora de móviles brasileña
por 7.500 millones de euros. EFE