El vallisoletano Carlos de Paz ha regresado a la Sala 0 del Museo Patio Herreriano de Valladolid con una muestra que, según ha explicado el propio artista, "nada tiene que ver con su trabajo anterior", una ruptura artística, pero también física, que se produjo a consecuencia de la fractura de sus dos brazos en un accidente doméstico.