Taipei, 29 oct (EFE).- El primer ministro taiwanés, Wu Dun-yih,
aseguró hoy que la carne molida y las vísceras de vacuno
estadounidense no se venderán en la isla, por miedo a la transmisión
de enfermedades y a pesar de los acuerdos firmados con Washington.
Ante las protestas de los consumidores, el Gobierno instó a los
importadores a que formen una asociación para controlar el ingreso
de la carne de vacuno estadounidense.
El tema transciende el riego de comer la carne y otros aspectos
fitosanitarios y debe enfrentar la fuerte reacción de temor de los
consumidores, dijo el portavoz del Gobierno Su Jun-pin.
El Gobierno no tiene planes de renegociar con Estados Unidos este
asunto, tras acceder al ingreso de carne molida y de vísceras de
vacuno estadounidense.
El presidente isleño, Ma Ying-jeou, pidió moderación y
comprensión ante el tema, ya que la isla necesita proteger la
seguridad de sus ciudadanos y también cumplir con sus compromisos
internacionales.
"El equilibrio entre la protección de la salud del pueblo y los
esfuerzos nacionales de participación internacional es la misión
principal del Gobierno", explicó Ma en una reunión con empresarios.
El presidente agregó que respetaba la iniciativa de los
importadores isleños de no comprar partes de vacuno con mayor
peligro de transmitir la encefalopatía bovina.
La apertura de la importación de carne molida y vísceras de
vacuno estadounidense ha desencadenado fuertes protestas del público
y de políticos de todos los partidos isleños.
El Gobierno asegura que el acuerdo especifica mecanismos de
control muy estrictos para asegurar que la carne importada no supone
peligro alguno para la salud.
"Los términos del acuerdo son suficientes para proteger la salud
de los taiwaneses", señaló Ma.
El Departamento de Sanidad anunció la semana pasada que
levantaría la prohibición de importar carne en hueso, carne molida,
vísceras, médula espinal y cerebro de vacuno.
La prohibición fue impuesta en 2003, cuando se declaró en Estados
Unidos la encefalopatía bovina, llamada enfermedad de las "vacas
locas".
Taiwán permitió la importación de carne de vaca estadounidense
sin hueso en el 2006, pero no la de carne molida ni de otras partes.
La encefalopatía bovina está vinculada a una enfermedad que
afecta a los seres humanos, el llamado Mal de Creutzfeldt-Jakob.EFE