Sao Paulo, 4 nov (EFE).- La española Telefónica, que hoy mejoró
su oferta para adquirir la operadora brasileña GVT, se anticipó a
una posible adquisición y ya le solicitó al Gobierno brasileño que
evalúe si la operación puede violar las leyes antimonopolio,
informaron fuentes oficiales.
Según un acto publicado hoy en el Diario Oficial de la Unión, el
Ministerio de Justicia abrió un proceso para establecer si la
posible adquisición de la operadora Global Village Telecom (GVT) por
parte de Telesp, la principal subsidiaria de Telefónica en Brasil,
puede perjudicar la libre competencia en el mercado.
Las consecuencias de la posible "adquisición por parte de Telesp
de todas las acciones representativas del capital social de GVT"
serán evaluadas por la Secretaría de Defensa Económica (SDE) del
Ministerio de Justicia a petición de la propia Telesp y de GVT,
según el acto publicado en el Diario Oficial.
La secretaría es uno de los órganos de combate a los monopolios
del Gobierno brasileño.
La adquisición de GVT por parte de Telesp, sin embargo,
difícilmente puede amenazar el liderazgo de Oi, la mayor operadora
de telefonía fija del país y que fue fruto de una fusión entre
Telemar y Brasil Telecom.
Telesp es operadora de telefonía fija de Sao Paulo, el estado más
populoso de Brasil, en tanto que GVT ofrece servicios de telefonía
fija e internet en banda ancha en estados del sur del país.
El control de GVT también está en la mira de la francesa Vivendi,
que hizo una oferta antes de la empresa española.
Telefónica condicionaba la compra de GVT a que esta compañía
eliminara las restricciones a la operación, lo que se hizo ayer; a
que la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) apruebe
previamente el proceso y a que los accionistas de la operadora
acepten vender más del 50% del control.
El proceso fue acelerado el martes con la decisión de los
accionistas de la GVT de modificar sus normas internas para
facilitar la venta, confirmó hoy a Efe una fuente de la empresa.
Los accionistas decidieron en la Asamblea General Extraordinaria
de ayer "dispensar" a un posible comprador del pago de un "premio"
de un 25% sobre la mejor cotización de los últimos doce meses.
La condición para ello es que la oferte se liquide en dinero
antes del 28 de febrero a un precio mínimo por acción de 48 reales
(unos 27,6 dólares de hoy).
Además, el comprador deberá ser un proveedor de servicios de
telefonía fija, móvil o internet de banda ancha con capacidad
financiera suficiente para adquirir el 100% del capital de la
empresa, aunque no sea algo obligatorio.
Para estudiar las propuestas, el Consejo de Administración de GVT
contrató el pasado viernes los servicios del Credit Suisse y del
Goldman Sachs como consultores financieros.
A comienzos de septiembre, Vivendi llegó a un acuerdo para
hacerse con el 20% de GVT y luego indicó que haría la misma oferta,
de 42 reales (unos 24,3 dólares) por cada acción, para asumir el
control total de la compañía, en una operación calculada en 5.400
millones de reales (unos 3.130 millones de dólares).
Esta última oferta todavía no se ha hecho efectiva, pero la
tendría que mejorar notablemente para cumplir las condiciones de los
accionistas de GVT y superar a la de Telefónica.
Telefónica, por intermedio de Telesp, elevó hoy su oferta inicial
de 48 reales (unos 27,8 dólares) por título hasta 50,50 reales.
La mejoría de la oferta elevó a unos 2.700 millones de euros
(casi 4.000 millones de dólares) el valor que la empresa se dispone
a pagar por GVT, informó Telefónica en un comunicado enviado a la
Comisión Nacional del Mercado de Valores de España.
GVT obtuvo ganancias por 57,2 millones de reales (unos 33,1
millones de dólares) en el tercer trimestre de 2009 con una
facturación entre julio y septiembre de 442,3 millones de reales
(unos 256,4 millones de dólares). EFE