Panamá, 18 may (EFE).- Una "torre financiera" que albergará
entidades públicas y privadas será la nueva edificación icónica que
le "cambiará la personalidad" a la ciudad de Panamá, afirmó hoy el
ministro panameño de Economía y Finanzas, Alberto Vallarino.
"Esa es la idea, que Panamá siendo una ciudad portuaria, de
costas, de entrada Pacífica al Canal (interoceánico), cuente con
este tipo de edificios", dijo el ministro a los periodistas.
"Todos vemos en las capitales donde se hacen estos edificios
emblemáticos cómo le cambian la personalidad a la ciudad, así lo
hizo Barcelona" y otras ciudades como Dubai, Taipei y Kuala Lumpur,
entre otras, indicó Vallarino.
La torre financiera, que se levantará frente a la bahía de
Panamá, tiene un diseño en forma elíptica que fue elaborado por la
empresa Skidmore, Owings & Merril (SOM), una de las principales
firmas de arquitectura de los EE.UU., precisó.
El interés del Gobierno es que la construcción esté lista para su
inauguración en 2013, cuando se cumplen los 500 años del
descubrimiento del Mar del Sur (océano Pacífico) por Vasco Núñez de
Balboa.
La obra, que se abrirá a licitación, puede costar unos 250
millones de dólares.
Gran parte de la torre será ocupada por entidades económicas del
Estado y al menos un tercio será vendida al sector privado para
recuperar costos de inversión.
La construcción albergará por lo menos siete entidades públicas,
además de empresas locales y multinacionales.
La torre estará ubicada en los terrenos que antes fueron de la
embajada estadounidense en Panamá.
La embajada de EE.UU., construida en la capital panameña en 1938
frente al Océano Pacífico, se trasladó en 2007 a un edificio en la
que operó la base militar estadounidense de Clayton, en las orillas
del Canal de Panamá, luego de que el Gobierno del presidente Martín
Torrijos (2004-2009) cediera estos terrenos a cambio de los de su
antigua sede, en la Avenida Balboa.
La edificación se convertirá en un centro de atracción turística,
porque su cúspide tendrá un mirador accesible a todo el público. EFE