Nueva York, 21 feb (EFE).- Los mercados neoyorquinos vivieron hoy un día gris, contagiados tal vez de los nubarrones que se cernían sobre Manhattan, con una jornada de pocos movimientos o eventos destacables.
Wall Street vivió un día sin historia, de aumentos moderados y altibajos que al final acabó optando por las pérdidas muy leves en la última media hora de la sesión, en lo que pareció una pequeña toma de beneficios para comenzar el fin de semana.
Al final, descensos del 0,19 % para el Dow Jones de Industriales y el S&P 500 y del 0,10 % para el índice compuesto del mercado Nasdaq.
La sesión estuvo influida por el único índice económico del día, que mostró que el ritmo de venta de casas usadas en el país bajó en 5,1 % en enero y quedó en una tasa anual de 4,62 millones de unidades, la más baja desde julio de 2012.
Esa cifra mediocre se atribuyó solo parcialmente a la serie de tormentas de frío y nieve que han sufrido los Estados Unidos, ya que en las últimas semanas varios índices apuntan al temor de una pérdida de empuje de la recuperación de la economía estadounidense.
Wall Street también quedó hoy afectada por algunos resultados de regulares de beneficios empresariales, como los que presentó tras el cierre de ayer Hewlett-Packard, que hoy perdió un 1,32 %.
De cara a la próxima semana, los inversores estarán muy atareados siguiendo varias intervenciones de responsables de la Reserva Federal, aunque sin duda la más importante será la de la presidenta de la entidad, Janet Yellen, ante un comité del Senado.
Los mercados siguen pendientes de cualquier indicio, aunque sea mínimo, de cómo va a proseguir la Fed en el camino de retirada progresiva de su estímulo monetario, que tras los recortes de diciembre y enero asciende ahora a 65.000 millones de dólares mensuales.
El viernes, el Departamento de Comercio estadounidense divulgará su primera revisión sobre las cifras del PIB del último trimestre de 2013, en lo que puede ser un nuevo indicio acerca de si la recuperación de la economía mantiene, o no, su impulso.