Montevideo, 13 feb (EFE).- El Gobierno de Uruguay anunció hoy que ha autorizado la construcción de un polémico puente sobre la Laguna Garzón, que separa los departamentos de Maldonado, donde se encuentra el balneario de Punta del Este, y Rocha, fronterizo con Brasil y considerado un fuerte polo turístico en el futuro.
La decisión, que en los últimos años generó una fuerte controversia entre empresarios argentinos que tienen propiedades en la zona, fue anunciada en una rueda de prensa por el secretario de la Presidencia, Alberto Breccia, al concluir la reunión semanal del Consejo de Ministros.
En el encuentro "se acordó una salida para el puente sobre la Laguna Garzón" con el objetivo de "extender la industria turística hacia Rocha", indicó Breccia.
Según Breccia, para la construcción del puente el Ejecutivo uruguayo ha tocado la puerta del arquitecto Rafael Vignoli, el responsable de la obra del Aeropuerto Internacional de Carrasco (AIC), en Montevideo.
Como parte del proyecto, el Gobierno convertirá la carretera que va de José Ignacio, la localidad contigua a Punta del Este en dirección hacia el oriente del país, hasta La Paloma, en Rocha, de ruta nacional a camino departamental "para evitar el tránsito por allí de camiones y maquinaria pesada".
En José Ignacio hay varios hoteles y desarrollos inmobiliarios de lujo, y famosos como la cantante colombiana Shakira tienen propiedades allí.
También como parte de la iniciativa "se ha decidido integrar la Laguna (Garzón) al Sistema Nacional de Áreas Protegidas, de forma tal de preservar, aún con el impacto que todos conocemos que habrá de producirse, mayor o menor, por la construcción del puente, debidamente el ecosistema", agregó Breccia.
Actualmente esa ruta está cortada por la Laguna Garzón, que solamente puede ser cruzada en una balsa que transporta automóviles, por lo que los turistas que quieren ir a Rocha desde Montevideo toman la ruta 9, una vía interior, y hacen un recorrido más largo pero más rápido.
En el año 2008 el empresario argentino Eduardo Constatini presentó a la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) un proyecto para financiar el puente como parte de un plan inmobiliario que prevé la construcción de medio millar de casas en Rocha y que se llama Las Garzas.
En respuesta, otro empresario argentino, Paolo Rocca, que tiene un establecimiento rural en la zona, ofreció 500.000 dólares a través de la fundación "Amigos de las lagunas costeras de Rocha", para la creación de un sistema eléctrico de balsas en la laguna.
El objetivo de Rocca es evitar la construcción del puente y mantener la exclusividad y tranquilidad de la zona, que, sin embargo, ha visto en los últimos años como aumentaba la llegada de turistas desde el vecino del norte, Brasil.
Un tercer empresario argentino, Santiago Tomás Soldati, propietario de una casa sobre Laguna Garzón, presentó a su vez un recurso contra el proyecto Las Garzas por razones similares.
El este uruguayo es lugar habitual de veraneo de turistas de la región, especialmente argentinos, aunque también llegan de Brasil, Chile y Paraguay. EFE