Caracas, 12 may (EFE).- Venezuela concretó hoy dos asociaciones
petroleras con consorcios internacionales liderados por la española
Repsol y la estadounidense Chevron, que involucran inversiones de
40.000 millones de dólares para extraer hasta 800.000 barriles de
crudo diarios en la rica Faja del Orinoco.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, encabezó el acto de firma
de los convenios para la constitución de las empresas mixtas
denominadas Petrocarabobo y Petroindependencia, que operarán los
bloques Carabobo I y Carabobo III, respectivamente, de la Faja, en
el oriente del país.
La estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA) controlará el 60 por
ciento accionarial en ambas empresas mixtas, mientras que los
consorcios extranjeros estarán liderados, en Petrocarabobo, por
Repsol con el 11 por ciento accionarial, y en Petroindependencia por
Chevron con el 34 por ciento.
Los acuerdos firmados este miércoles incluyeron el compromiso de
pago a Venezuela por parte de los socios internacionales de unos
"bonos de entrada" por un total de 1.500 millones de dólares y una
financiación a PDVSA por otros 2.050 millones de dólares, según
datos oficiales.
De esos montos, 2.050 millones de dólares corresponden al
consorcio liderado por Repsol (1.000 millones de dólares como bono
de entrada y 1.050 como financiación a PDVSA) y 1.500 al encabezado
por Chevron (500 millones de dólares como bono de entrada y 1.000
como compromiso de financiación).
Se prevé que cada empresa mixta alcance una producción de hasta
400.000 barriles diarios de crudos pesados y extrapesados, y que la
llamada fase de "producción temprana" se inicie a finales de 2012
con un bombeo de 50.000 barriales/día.
Cada proyecto incluye además la construcción de una refinería
para mejorar los crudos de hasta 40 grados API disponibles en los
bloques Carabobo I y Carabobo III, que comenzaría a operar en el
2016, indicaron portavoces oficiales venezolanos.
Chávez agradeció la "confianza" de los consorcios extranjeros en
su Gobierno "revolucionario" y expresó su seguridad en que esas
asociaciones serán exitosas y favorecerán no solo al pueblo
venezolano si no a los de los países de las empresas involucradas.
El mandatario venezolano también destacó que los proyectos
petroleros, con licencias de operación por hasta 40 años, generarán
"miles de empleos" en Venezuela y recaudarán miles de millones de
dólares que serán dedicados al desarrollo social de Venezuela.
Por su parte, el presidente de Repsol, Antonio Brufau, destacó en
un breve discurso tras la firma de los acuerdos el "reto
tecnológico" que significa para la empresa que dirige participar en
el proyecto de explotación de crudos pesados y extrapesados en la
Faja venezolana.
"Trabajaremos para que no se arrepientan (el Gobierno de
Venezuela) por haber confiando en nuestro consorcio", añadió Brufau.
Antes de proceder a la firma del acuerdo, que fue suscrito por
parte venezolana por el presidente de la corporación petrolera,
Eulogio Del Pino, el ejecutivo de Repsol calificó de "muy
importante" el "estar presente en la región del mundo con mayores
reservas de petróleo".
Preguntado sobre la posibilidad de problemas de seguridad legal
respecto a las inversiones extranjeras en Venezuela, Brufau
respondió: "nadie nos obliga a estar en Venezuela. Estamos aquí
voluntariamente. Venezuela siempre ha cumplido".
Repsol informó de que su participación en el proyecto Carabobo le
permitirá añadir 268 millones de barriles de reservas netas en los
próximos 10 años, con una inversión neta de unos 750 millones de
dólares solo entre 2010 y 2014.
"El proyecto podría alcanzar una producción máxima de 400.000
barriles de petróleo/día durante 40 años e incluye, además, la
construcción de un mejorador de crudo pesado", precisó Repsol en un
comunicado.
La petrolera española resaltó que el desarrollo de crudos pesados
en Venezuela contempla además "un acuerdo comercial por el que el
sistema de refino de Repsol en España procesará 165.000 barriles de
petróleo/día".
Ello, añadió la empresa, le generará "una importante ventaja
competitiva gracias a la experiencia de Repsol en el uso de
avanzadas técnicas de alta conversión en sus refinerías".
Venezuela, quinto exportador mundial de crudo, se ha asociado con
una veintena de países de todo el mundo para explotar la rica Faja
del Orinoco, un área de unos 55.000 kilómetros cuadrados con
reservas calculadas en al menos 234.000 millones de barriles de
crudos pesados y extrapesados, las mayores del planeta. EFE
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