Pekín, 2 nov (EFE).- El primer ministro chino, Wen Jiabao,
viajará a Egipto encabezando la delegación china en la Cuarta Cumbre
Ministerial del Foro de Cooperación China-África, que decidirá el
plan de acción entre los dos agentes para el próximo trienio.
"Aumentaremos la cooperación con África. Las áreas principales
estarán relacionadas con la energía, infraestructuras, industria,
agricultura y otros sectores", anunció el viceministro de Comercio,
Chen Jian, en una rueda de prensa hoy en Pekín.
Wen, que estará acompañado por los ministros de Comercio, Chen
Deming, y de Asuntos Exteriores, Yang Jiechi, llevará a cabo una
visita oficial a Egipto del 6 al 7 de noviembre, durante la que se
reunirá con el presidente egipcio, Hosni Mubarak, y el día 8
participará en la ceremonia de inauguración del foro.
La reunión, que se celebrará en la ciudad egipcia de
Sharm-el-Sheij, servirá para decidir el plan de acción estratégico
entre China y África para el período 2010-2012.
El comercio bilateral entre el gigante asiático y el continente
africano ascendió en 2008 a 106.800 millones de dólares (72.400
millones de euros), lo que multiplica por diez la cantidad
registrada el año 2000 (10.500 millones de dólares ó 7.100 millones
de euros).
Con estas cifras, se cumplió el objetivo de rebasar los 100.000
millones de dólares anuales en intercambios entre China y África dos
años antes de la fecha prevista inicialmente, fijada en 2010.
Sin embargo, en los nueve primeros meses de este año, la cifra
cayó a 63.270 millones de dólares (42.870 millones de euros), un
descenso del 25 por ciento a causa de la crisis económica global.
Las inversiones chinas en África también crecieron
exponencialmente en los últimos tiempos, lo que ha desatado la
polémica entre las economías occidentales al considerar que Pekín
practica una suerte de "neocolonialismo" con África, en su intensa
búsqueda de recursos naturales y su falta de ética al apoyar a
proveedores tan conflictivos como Sudán o Zimbabue.
"Hemos centrado nuestras inversiones en telecomunicaciones,
agricultura, energía, manufacturas y los servicios claves", expuso
Chen, quien recordó que China ha ofrecido ayuda a 53 países
africanos "sin poner condiciones".
El viceministro reconoció, no obstante, que hasta un tercio de la
ayuda china a África va a parar al sector energético, una de las
principales preocupaciones de China, segundo consumidor mundial de
crudo y que tiene problemas para saciar su voraz apetito de
petróleo.
El último ejemplo de la opaca relación entre Pekín y sus aliados
africanos es el acuerdo de 7.000 millones de dólares entre el Fondo
Internacional de China (CIF) -una sociedad con sede en Hong Kong y
de las que las autoridades chinas se han desvinculado, a pesar de su
nombre- y el régimen militar de Guinea Conakry para la exploración
de los recursos naturales petroleros y mineros del país africano.
"Planearemos una cooperación práctica para los próximos tres
años. (...) Seguiremos promoviendo nuestra cooperación en numerosos
campos, incluyendo agricultura, infraestructuras, comercio,
inversiones, medicina y otra áreas", concluyó el viceministro chino
de Comercio, que no quiso dar detalles de las cifras del próximo
plan de acción.
El Foro de Cooperación China-África se celebró por primera vez en
Pekín en el año 2000, y se ha reunido cada tres años desde entonces
con encuentros en Addis Abeba, Etiopía (2003) y nuevamente en la
capital china en 2006. EFE