Quito, 12 dic (EFE).- El presidente de Ecuador, Rafael Correa,
advirtió hoy que en junio se comenzará a explotar el petróleo del
campo Yasuní si no recibe la compensación internacional que busca
para mantener el crudo de esa reserva natural en tierra.
"Si hasta junio no está esto (apoyo internacional), tendremos que
explotar la primera parte del ITT que no está dentro del parque
nacional Yasuní", dijo Correa en referencia al campo Ishpingo
Tambococha Tiputini, que está en la Amazonía ecuatoriana,
Indicó que de "850 millones de reserva podemos explotar 400 y
pico si no está hasta junio, si no vemos concreción" en los aportes
externos.
"Pero si vemos concreciones, en buena hora, dejamos todo el
petróleo bajo tierra, pero, si no, empezaremos a extraer la mitad
del petróleo que esta fuera del Parque Nacional Yasuní", insistió.
Mencionó que hasta ahora hay países que han mostrado un "mayor
grado de compromiso" con la iniciativa ecuatoriana, entre los que
mencionó a Alemania, con entre 650 millones de dólares a 910
millones de dólares, en 13 años, y España con 242 millones de
dólares en el mismo período.
Entre los países con un nivel de compromiso medio mencionó a
Francia y Suecia, pero recalcó que Ecuador es el país que más está
contribuyendo al no extraer todo el petróleo que tiene en el
subsuelo de la reserva del Yasuní.
Según el jefe de Estado, entre aportes "medio y bastante
probables" el país contaría con entre 1.504 y 1.764 millones de
dólares, es decir entre el 42 y 49 por ciento del objetivo mínimo".
"Necesitamos obtener el doble de esto y un poquito más para
alcanzar el mínimo que hemos propuesto al mundo: al menos el 50 por
ciento de lo que el país está renunciando", dijo en referencia a los
7.000 millones de dólares que costaría el crudo al precio actual.
Aclaró que Ecuador "no esta pidiendo un favor, estamos haciendo
un favor" y pide "corresponsabilidad" al mundo para su iniciativa
que, según dijo, tiene "atención mundial".
Correa anotó que durante la cumbre sobre el clima de Copenhague
se firmará un fideicomiso que canalizaría los recursos y que éste
será administrado por el Estado ecuatoriano y el Programa de las
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
El proyecto pretende dejar bajo tierra cerca de 1.000 millones de
barriles de crudo en el sector nororiental de la Amazonía
ecuatoriana, donde también se encuentra el Parque Nacional Yasuní,
uno de los lugares de mayor biodiversidad del mundo, a cambio de una
compensación económica por parte de la comunidad internacional.
El proyecto ITT prevé evitar la producción de 410 millones de
toneladas de dióxido de carbono (CO2) por la no explotación del
petróleo. EFE