Por Simon Evans
CARDIFF (Reuters) - La derrota de la Juventus por 4-1 ante el Real Madrid en la final de la Liga de Campeones fue calificada de "decepción galáctica" por los medios italianos, pero debería ser más un golpe de realidad que el fin de una era para el club de Turín.
Una séptima derrota en nueve finales del principal torneo de clubes europeo deja al conjunto italiano, que recientemente conquistó su sexta liga italiana, estudiando formas de convertir su dominio en casa en la gloria en el continente.
El marcador del sábado fue algo duro para el conjunto de Max Allegri, que realizó una excelente actuación en la primera mitad, en la que empató 1-1 tras un magnífico tanto del croata Mario Mandzukic.
“Parecía el inicio de un cuento de hadas pero en su lugar, tras el descanso, la Juventus desapareció de la escena y el dominio del Real Madrid fue total”, escribió el diario Corriere dello Sport.
“La pesadilla de la Juventus se adueñó de otra noche mágica", escribió La Repubblica, en referencia a haber perdido cinco finales desde la última vez que conquistaron el título en 1996.
El foco se centra ahora en cómo podría la Juventus reforzar su equipo para ser un duro rival para los mejores de Europa la próxima temporada.
El tono de Allegri sugiere que no tiene en mente grandes cambios, sin embargo.
"No, no creo que la Juve haya llegado al final de un ciclo para nada", dijo el entrenador tras el partido.
"(Gianluigi) Buffon seguirá siendo portero la próxima temporada y (Andrea) Barzagli se quedará con nosotros otro año. Tienen aún mucho que dar a este club pero podemos mejorar el equipo", añadió.
"Todos tenemos que descansar pero después de las vacaciones volveremos con nuevas ganas y estímulos", dijo.
No sería raro ver que la Juve refuerza su centro del campo, donde Sami Khedira parece por debajo del nivel que mostró en su época en el Real Madrid, y en el ataque, en el que Gonzalo Higuaín, pese su buen hacer en liga, fue de nuevo ineficaz en una gran ocasión.