MADRID (Reuters) - El entrenador del Real Madrid, Zinedine Zidane, confía en que la primera derrota del equipo en nueve meses, que puso fin a un récord de 40 partidos invicto en todas las competiciones, no tenga un impacto perjudicial en la temporada.
El conjunto blanco, que aspira a su primer título en la Liga española desde 2012, perdió 2-1 ante el Sevilla el domingo, encajando dos goles en los últimos cinco minutos y manteniendo el liderato pero sólo un punto por delante del Sevilla y dos sobre el Barça.
"No va a afectar en nada", dijo Zidane en la página web del club. "Sabíamos que iba a pasar y ahora todos los partidos van a ser complicados ... estoy muy orgulloso de mis jugadores y de lo que hicimos durante 40 partidos sin perder".
Desde que perdió por 2-0 ante el Wolfsburgo en la Liga de Campeones la temporada pasada, el Real Madrid sumó una racha de 30 victorias y 10 empates, anotando 115 goles.
Hasta que llegó el doloroso revés del domingo, que comenzó con un gol en propia meta del exdefensa del Sevilla, Sergio Ramos, al que siguió otro de Stevan Jovetic en el tiempo de descuento.
"Tenemos que digerir la derrota porque a nadie le gusta perder y menos de esta manera", dijo Zidane. "El fútbol es así y hay que descansar", añadió el que fuera campeón de Europa con el Madrid y ganador de un Mundial con Francia.
Ramos tampoco perdió el optimismo tras su traspiés, sobre todo porque el Real Madrid ha jugado un partido menos que sus rivales.
"Dentro de lo malo dependemos de nosotros mismos, vamos primeros", dijo. "Ahora llega la montaña más alta y a ver quién la escala más rápido y quién la aguanta".
El Real, que también ha pasado a los octavos de final de la Champions, campeonato que ganó el año pasado, juega en casa la ida de los cuartos de la Copa del Rey el miércoles ante el Celta de Vigo y se medirá el sábado al Málaga en Liga.