El fondo está alojado en la estructura de Renta 4 (MC:RTA4), pero la gestión está delegada en Quadriga Asset Managers, desde donde Bononato decide en qué se invierte y en qué no. El ‘hard close’ también se aplica a la réplica UCITS del fondo que hay en Luxemburgo, cuyo cierre a nuevas inversiones está en trámite, así como a las varias sicav que gestiona con la misma estrategia. En el caso de estas últimas, el bloqueo se hace poniendo una comisión de suscripción elevada, lo que desincentiva la inversión.
En total, el ‘hard close’ afecta a un patrimonio de 80 millones de euros -casi 30 de ellos en el fondo español- y el bloqueo, vigente desde el pasado 31 de diciembre, se mantendrá ‘sine die’. Se levantará “en función de cómo evolucionen los mercados”, afirman desde el fondo.