San Juan, 9 sep (EFE).- La agencia Moody's aseguró hoy que es poco probable que los titulares de bonos de Puerto Rico accedan a negociar con el Gobierno isleño en los términos que éste propone y advirtió que podría bajar aún más sus calificaciones de la deuda puertorriqueña.
"Si bien el plan presentado hoy por Puerto Rico es integral, Moody's cree que la capacidad del Estado Libre Asociado (a EE.UU.) de poner en práctica muchas de las políticas recomendadas planteará desafíos políticos", advirtió Ted Hampton, vicepresidente del Servicio a Inversores de Moody's, en un comunicado.
Añadió que "es poco probable que los titulares de los muchos bonos de Puerto Rico estén de acuerdo en renunciar o aplazar (la devolución de) importantes sumas de capital e interés".
El Gobierno de la isla propuso hoy reestructurar deuda por valor de 47.000 millones de dólares, lo que significa el 65 % del total, y pidió a los titulares de bonos que le eximan de pagar en los próximos cinco años unos 13.000 millones de dólares, el 72 % de los que debería abonar en ese periodo.
Todo ello, después de aplicar diversas medidas de austeridad, entre las cuales no está el despido de trabajadores del sector público, el mayor empleador de la isla, y de acometer iniciativas para tratar de recuperar el crecimiento económico tras casi una década de recesión.
"Hay una alta probabilidad de que esto derive en litigio prolongado, sobre todo por parte de los inversionistas que tienen obligaciones generales u otros valores con fuertes protecciones legales", apuntó igualmente el analista de Moody's en referencia a los bonos cuya devolución está garantizada por la Constitución de Puerto Rico.
Según dijo, "para aprovechar plenamente los beneficios fiscales del plan, el Gobierno de Puerto Rico tiene que pedir a los acreedores que hagan sacrificios", tal y como hizo hoy el gobernador Alejandro García Padilla en un mensaje público difundido por internet y a través de las principales cadenas de televisión y radio de la isla.
Por todo ello, advirtió de que es posible que revise a la baja sus calificaciones de la deuda de la isla, que en la actualidad son de CAA3 y Ca, correspondientes con los dos últimos escalones del grado especulativo e indicativas de un riesgo sustancial e inminente de impago, respectivamente.
Esta agencia de calificación tan sólo tiene una calificación más en su escala, que es la que se corresponde directamente con el impago.