PARÍS - La Corte de Casación de Francia, el tribunal supremo del país para asuntos judiciales, ha dictaminado que Lafarge, la cementera francesa que ahora pertenece al conglomerado suizo Holcim, podría ser procesada por complicidad en crímenes contra la humanidad. Las acusaciones se refieren a pagos realizados a grupos yihadistas, incluido el ISIS, para mantener las operaciones en su planta de Siria durante los años 2013 y 2014.
La decisión del tribunal ha confirmado hoy que se produjeron transacciones financieras de Lafarge con las organizaciones terroristas. Sin embargo, el tribunal también señaló que los cargos relacionados con la puesta en peligro de la vida de los empleados no procederían. Este aspecto del caso se desestimó porque la legislación francesa no se extiende a la protección de los trabajadores sirios en estas circunstancias.
Este último acontecimiento en Francia sigue a una acción legal previa en Estados Unidos, donde un tribunal ordenó a Lafarge en otoño de 2022 pagar una multa sustancial. La sentencia estadounidense exigía a la empresa el pago de 778 millones de dólares por su apoyo al ISIS y al Frente al-Nusra, reconociendo la gravedad de las acciones de Lafarge en relación con el terrorismo internacional.
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