Mario Villar
Nueva York, 23 jul (EFE).- Tras varios días con subidas, Wall Street enlazó hoy una tercera jornada a la baja lastrada por los decepcionantes resultados de varios gigantes del parqué, que devolvieron al Dow Jones al nivel del cierre del pasado año.
Ni el grupo industrial 3M, ni el fabricante de maquinaria Caterpillar (NYSE:CAT), ni American Express (NYSE:AXP) fueron capaces de convencer a los inversores con sus cuentas trimestrales y encabezaron las pérdidas entre los treinta valores del Dow Jones.
Ese pesimismo se contagió además a otros títulos e hizo que sólo un puñado de las empresas del principal indicador de Wall Street terminasen en verde, lideradas por las tecnológicas Cisco Systems (NASDAQ:CSCO) (1,74 %), Microsoft (NASDAQ:MSFT) (1,25 %) e IBM (NYSE:IBM) (0,86 %).
En conjunto, el Dow Jones perdió un 0,67 % y se situó en el rojo en lo que va de año, con 17.731,95.
Tras las bajadas de los últimos días, el Dow ve ya lejos los psicológicos 18.000 enteros en los que aún estaba al inicio de la semana y de los que ya antes le había alejado momentáneamente las turbulencias procedentes de Grecia y de China.
También tuvieron pérdidas hoy, aunque algo menores, el selectivo S&P 500 (-0,57 %) y el índice compuesto del mercado Nasdaq (-0,49 %), que el miércoles se había dejado un 0,70 % por los resultados de Apple (NASDAQ:AAPL) y Microsoft.
La empresa fundada por Bill Gates recuperó hoy posiciones, mientras que la compañía de la manzana se mantuvo en rojo, aunque con una bajada mucho más moderada.
Más que malos, los resultados empresariales que han tirado a la baja de Wall Street en los últimos días no han sido todo lo buenos que los analistas esperaban.
Con previsiones muy moderadas, se creía que las grandes empresas podían superar con creces esas expectativas y, al no hacerlo, han sido duramente castigadas por los inversores, según los analistas.
Los altos niveles del dólar frente a otras divisas han pesado mucho para algunos gigantes de la economía estadounidense, que han visto dificultadas sus exportaciones y que, en muchos casos, han visto como se reducía su facturación.
Y sobre todo, han hecho algo que no gusta en Wall Street, como es recortar las expectativas para el resto del año.
Ese chasco marcó hoy el paso de las operaciones, que no prestaron mucha atención al muy buen dato de desempleo en Estados Unidos.
Según se anunció hoy, la cifra semanal de solicitudes de subsidio por desempleo en el país bajó en 26.000 la semana pasada y se situó en 255.000, el menor nivel desde 1973.