Tokio, 24 mar (EFE).- El Parlamento japonés aprobó hoy el
presupuesto para el año fiscal 2010, que comienza en abril, por
valor récord de 92,3 billones de yenes (756.356 millones de euros)
con mayor protagonismo del gasto social.
La votación final del presupuesto más alto de la historia de
Japón salió adelante en la Cámara Alta con los votos de la mayoría
de la coalición de Gobierno, liderada por el Partido Democrático
(PD) del primer ministro Yukio Hatoyama, quien puso fin en
septiembre al dominio del Partido Liberal Demócrata (PLD).
El Gobierno nipón, que ha subrayado la importancia de cambiar
"cemento por gasto en la gente", ha reducido la dotación de obras
públicas, que han bajado un 18,3 por ciento, hasta los 5,8 billones
de yenes (47.528 millones de euros).
Por el contrario, ha aumentado los gastos de seguridad social un
9,8 por ciento, hasta los 27,3 billones de yenes (222.072 millones
de euros), y ha subido un 0,3 por ciento el gasto en defensa
nacional, hasta los 4,79 billones de yenes (39.251 millones de
euros).
En la sesión parlamentaria de hoy, el primer ministro resaltó la
importancia de recuperar la salud fiscal de la segunda economía
mundial y "crear un círculo virtuoso en el cual empleo y demanda
mejoren con una estrategia de crecimiento que lleve a combatir la
deflación".
Este presupuesto incide en la necesidad de fortalecer la economía
japonesa, cuyos principales problemas son la deflación y la deuda
pública, para que se mantenga en la senda de crecimiento después de
pasar desde comienzos de 2008 y hasta el primer trimestre de 2009
por su peor recesión de la posguerra.
Sin embargo, este primer presupuesto del nuevo Gobierno del PD
tendrá que financiarse con la emisión de 44,3 billones de yenes
(363.018 millones de euros) en bonos, un récord que ampliará la
abultada deuda pública de Japón, que ya casi duplica el valor del
Producto Interior Bruto (PIB).
Además, este año fiscal será el primero desde el fin de la II
Guerra Mundial, en 1945, en que la emisión de deuda supere a los
ingresos del Estado por impuestos.
Durante la tramitación de las cuentas del primer ejercicio
completo para Hatoyama, que llegó al poder el pasado septiembre, ha
tenido que mediar entre algunos miembros de la coalición
gubernamental con los que posee mayoría suficiente en la dos Cámaras
de la Dieta (Parlamento nipón).
No obstante, aún deben definirse las ayudas a familias con niños
y la gratuidad de las matrículas en la educación secundaria, que se
decidirán antes del 31 de marzo, fin del actual ejercicio fiscal.
EFE