Por Roberto Samora
SAO PAULO, 30 nov (Reuters) -Los deslizamientos de tierra tras las fuertes lluvias en el sur de Brasil dejaron a decenas de personas desaparecidas en el estado de Paraná y cortaron el acceso por carretera a un importante puerto para los envíos de granos y azúcar, dijeron el miércoles las autoridades.
La carretera BR-277 que conduce a los puertos de Paranaguá y Antonina está cerrada al tráfico de vehículos hacia la costa desde el martes. El gobierno del estado de Paraná dijo que esperaba abrir parcialmente la carretera alrededor de las 1830 GMT.
Al menos 30 personas quedaron atrapadas en el deslizamiento de tierra en la carretera BR-376 en la ciudad de Guaratuba, según los funcionarios que dirigen las operaciones de rescate. Se han confirmado dos víctimas de los desprendimientos, según los bomberos.
Alrededor del 80% de las mercancías que se exportan desde Paranaguá, el segundo puerto más importante de Brasil en lo que respecta a los cereales y el azúcar, llegan en camiones, dijo la autoridad portuaria, que no quiso estimar las pérdidas ocasionadas por la interrupción.
Los operadores y las terminales de Paranaguá están moviendo ahora las mercancías almacenadas que se espera que duren hasta el fin de semana.
"Si la situación no se normaliza para el fin de semana, es muy probable que a partir del domingo y el lunes ya tengamos dificultades en la recepción de carga para el embarque de buques, especialmente en el corredor de exportación", dijo la autoridad portuaria de Paranaguá.
El operador ferroviario Rumo dijo que el servicio de trenes de carga a Paranaguá se reanudó con restricciones. Señaló que las mercancías están siendo entregadas al puerto y que estaba monitoreando las condiciones de las vías.
Los principales productos que llegan por ferrocarril son el azúcar, la soja y el maíz, según las autoridades portuarias.
Hasta ahora no ha habido impacto en las exportaciones, dijo la asociación de exportadores de granos Anec, pero si las vías siguen comprometidas, puede haber un retraso en los envíos de carga y la posibilidad de que los exportadores paguen demoras.
(Reporte de Roberto SamoraEditado en español por Javier López de Lérida y Aida Peláez-Fernández)