El reciente cambio de tendencia de la bolsa europea ha pasado rápidamente de una situación ideal de crecimiento estable a una repentina venta generalizada. No obstante, el equipo de estrategia de Barclays (LON:BARC) considera que la intensa reacción del mercado es demasiado extrema.
Observan que las grandes fluctuaciones del mercado se han visto magnificadas por posiciones demasiado grandes y frecuentemente respaldadas por dinero prestado, así como por la reversión de operaciones rentables en áreas como la tecnología, Japón y las divisas digitales. Sin embargo, mencionan que los indicadores del mercado sugieren ahora que se han vendido demasiadas acciones, se han ajustado las posiciones de inversión y el valor actual del yen japonés parece más razonable.
Los estrategas también hacen hincapié en la creciente comprensión de que los beneficios de la Inteligencia Artificial podrían tardar más tiempo en hacerse realidad, mientras persiste el gasto en inversiones empresariales, lo que afecta al sector tecnológico, muy popular.
"La reducción de la especulación excesiva es beneficiosa, la evaluación del valor ha mejorado y el impulso de los beneficios por acción (BPA) sigue siendo fuerte", afirman en su análisis.
Aunque reconocen que el crecimiento económico se está ralentizando en todo el mundo, mencionan que no está fallando del todo. No todos los indicadores de recesión predicen un declive económico; el sector empresarial sigue funcionando bien, la disponibilidad de crédito no se ha restringido considerablemente y las empresas no se muestran excesivamente negativas sobre el futuro. Tras el descenso de las cotizaciones bursátiles, el valor de las acciones ha caído por debajo de los ajustes de los beneficios por acción (BPA).
Aunque creen poco probable que se produzca una reducción urgente de los tipos de interés, Barclays prevé que la Reserva Federal de EE.UU. participará pronto en la tendencia mundial de reducción de los tipos de interés. Esto, argumentan, "debería proporcionar un fuerte apoyo a la economía y afirmar el escenario de un ajuste de mitad de ciclo".
Se sabe que los mercados bursátiles durante el verano son complicados, y las recientes variaciones impredecibles de las cotizaciones pueden persistir durante varios días o semanas, ya que el proceso de reducción del riesgo de inversión podría no haber concluido.
"En consecuencia, los precios pueden seguir siendo volátiles, mientras que las próximas elecciones estadounidenses probablemente mantendrán alerta a los mercados en la última parte del año", mencionaron.
En general, los analistas consideran exageradas las recientes ventas indiscriminadas y recomiendan comprar valores de forma selectiva cuando sus precios hayan bajado.
Han elevado su calificación del sector tecnológico europeo a una preferencia superior tras un descenso del 16% desde mediados de julio.
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