Madrid, 13 mar (.).- La Asociación de Líneas Aéreas (ALA) ha vuelto a insistir este lunes en que la propuesta de liberalización de siete torres de control adicionales, como segunda fase de la "exitosa" primera tanda de doce realizada a partir de 2011, es una media "muy positiva" y pide que el proceso comience a la mayor brevedad posible.
La experiencia de la primera tanda liberalizadora es que esta transición es un proceso complejo y que lleva su tiempo (desde que se licitaron en 2011 los servicios de aeródromo en las doce torres de control, no fue hasta dos años después, en 2013, cuando los nuevos operadores comenzaron a operarlas) y, en esta segunda fase, no será hasta 2025 o incluso 2026, cuando se culmine.
En el documento de alegaciones al proyecto de la Orden Ministerial (OM) de las torres presentado por la patronal, que representa a más del 85 % del tráfico aéreo en España, ALA señala que la experiencia de la primera fase ha dado lugar a una mayor eficiencia, manteniendo, o incluso mejorando, los niveles de calidad y sin menoscabo de la seguridad.
Estas afirmaciones de ALA su producen después de que la semana pasada, el PSOE acordara con Bildu, Esquerra Republicana (ERC) y BNG "proceder a la revisión" de la orden ministerial por la que Transportes decretó la liberalización de dichas torres de siete a propuesta de Aena (BME:AENA) y a la que se podía haber presentado alegaciones hasta el viernes 10 de marzo.
Actualmente, los servicios de control de aeródromo en las 12 torres liberalizadas, los prestan Saerco y Skyway (la antigua Ferronats), participada por Ferrovial (BME:FER), que ha anunciado que llevará su sede fuera de España, a Países Bajos, pero ALA no cree que esta decisión vaya a influir en el proceso.
MEJORAS DE LA EFICIENCIA DEL 60 %
ALA recuerda que, en el “Estudio de los Servicios de Tránsito Aéreo en España”, publicado por la CNMC en 2018, se cuantificaba la mejora de la eficiencia entre 2012 y 2017, medida como el coste de prestación del servicio de tránsito de aeródromo por movimiento, en un 60 % en las torres liberalizadas, frente a un 15 % en las no liberalizadas.
El marco regulatorio aeroportuario, establecido por la Ley , está basado en la “recuperación de los costes esperados y reconocidos por el regulador”, lo que implica que cualquier ahorro de costes o mejora de eficiencia obtenida por Aena acaba traspasándose a los usuarios mediante unas tarifas aeroportuarias más bajas, a través del mecanismo del DORA, destaca ALA.
La mejora de eficiencia obtenida por la primera fase de la liberalización, junto con otras medidas, ha facilitado que las tarifas aeroportuarias facturadas por Aena a las compañías aéreas se hayan congelado o bajado en términos nominales todos los años desde 2015 hasta la fecha, lo que ha redundado en un incremento del tráfico aéreo, de la conectividad y una mayor competitividad de los billetes, añade.
La asociación subraya que la evolución que ha tenido la tarifa por los servicios de tránsito de aeródromo (STA) cobrada por Aena a las compañías aéreas en el conjunto de los aeropuertos ha tenido una reducción acumulada en el periodo 2014-2022 del 13 %.
Esto es así, debido a que cualquier eficiencia de Aena se traslada al conjunto de los aeropuertos, de forma que la liberalización ha impactado positivamente también en los costes de los aeropuertos no liberalizados.
ES UN PROCESO DE LIEBRALIZACIÓN Y NO DE PRIVATIZACIÓN
Aunque algunas partes interesadas insisten en denominar a este proceso como “privatización”, ALA ve fundamental que se vea como lo que realmente es, un proceso de “liberalización”, mediante el cual cualquier proveedor civil de servicios de tránsito aéreo debidamente autorizado, pueda presentarse al mismo en una competencia por el mercado, tanto si es de propiedad pública como privada.
En este sentido, la asociación apoya el que se realicen los cambios legislativos necesarios para que el gestor público Enaire se pueda presentar a este proceso de competencia por el mercado, de forma que, en el caso de que su oferta fuese más competitiva que la del resto de licitadores, pudiese seguir siendo el proveedor de servicios de tránsito de aeródromo en una o más de las torres en cuestión
La patronal también respalda la recomendación de la CNMC en el citado estudio de que se realicen los cambios legislativos necesarios para en el futuro liberalizar también los servicios ATS de aproximación, y de esta forma seguir mejorando la eficiencia del sistema en su conjunto.
La asociación descarta que el proceso afecte a la viabilidad financiera de Enaire, dado que sus ingresos por servicios prestados a Aena de control de tránsito de aeródromo representaron en 2019 un 14,4 % del total.
El 82,3 % de sus ingresos lo generaron los servicios de navegación en ruta, servicios que Enaire tiene reservados en régimen de monopolio por el marco legal vigente.
ALA también niega que la primera fase del proceso de liberalización haya dado lugar a una precarización de las condiciones laborales de los controladores de las torres liberalizadas.
Según datos del mercado, un controlador de torre liberalizada tiene unos ingresos brutos anuales medios de alrededor de 50.000 euros, lo que supone más de tres veces el salario mínimo, y el doble del salario medio en España.